La Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia confirmó el viernes anterior, por mayoría, una condena de cinco años de prisión contra el exalcalde de Aserrí, Mario Morales Guzmán.
La pena contra Morales la había dictado el Tribunal Penal de Hacienda de Goicoechea, el 27 de enero del 2010, por los delitos de enriquecimiento ilícito (acrecentar el patrimonio personal), un delito de cohecho impropio (recibir una retribución o dádiva), y tres delitos de falsedad en la declaración jurada de bienes.
Por otra parte, los magistrados confirmaron en su resolución la sentencia de un año de cárcel para Juan Carlos Obando Umaña, exgerente de la empresa Berthier EBI de Costa Rica, por el delito de cohecho impropio en la modalidad de penalidad del corruptor.
En el por tanto del fallo (está pendiente de redacción el voto completo), la Sala Tercera anuló el comiso de un terreno propiedad del exalcalde y que había sido dictada por el Tribunal de Juicio de Hacienda. Sobre este aspecto ordenó realizar un nuevo debate.
“Queremos ver los argumentos porque todavía nos queda la posibilidad de la revisión, pero no puedo hacerlo hasta que no tenga la sentencia en su totalidad”, dijo.
Navarro agregó que su defendido todavía tiene unos días de tiempo antes de entregarse a la orden del Tribunal sentenciador. “Lo hará en el momento oportuno”, manifestó.
En ese momento, Obando laboraba como gerente de EBI, una compañía que procuraba la instalación de un relleno sanitario en El Huaso, de Aserrí.
Para el Tribunal de Juicio que dictó sentencia Obando “a sabiendas de la condición de funcionario público de Morales, le proporcionó una dádiva indebida para hacer actos futuros, propios de sus funciones, hechos algunos de ellos concretos y ciertos y otros futuros y eventuales”.