Un chofer remesero de la empresa VMA, que viajaba en un vehículo, disparó en varias ocasiones delante de un fiscal y dos oficiales de Tránsito luego de que lo detuvieran para aplicarle una sanción.
El hecho ocurrió en el sector de Cimarrones, Siquirres, Limón, cuando los policías de Tránsito le indicaron al conductor que estacionara el vehículo tras haber realizado un adelantamiento no permitido en doble franja amarilla.
Como no detuvo el vehículo, los policías Carlos Pérez e Iván Ramírez lo persiguieron y le pusieron delante la unidad, un kilómetro después, para que se detuviera. Así, le realizaron el parte, cuyo monto asciende a ¢300.000.
En ese momento, el conductor sacó un arma, y los oficiales le indicaron que se bajara del automotor, pero no lo hizo, pues señaló que solo un juez o fiscal lo podría hacer.
Precisamente, un fiscal transitaba por el sitio y se acercó a la zona. Tras identificarse con el sujeto, de apellido Baldelomar, le dijo que se bajara, y este procedió a hacerlo.
Sin embargo, Baldelomar empezó a gritarles improperios a los policías, y les dijo que los debería de matar, por lo que sacó su arma, nueve milímetros, y disparó al aire en varias ocasiones.
El hombre quedó en libertad tras determinarse que tiene domicilio fijo y arraigo familiar.
Aun así, el Ministerio Público lo investiga por los delitos de resistencia a la autoridad, amenazas y accionamiento del arma.
Los acompañantes de Baldelomar, de apellidos Cartín y Sánchez, figuran como testigos del hecho.
El oficial Pérez comentó: “No sabemos por qué actuó así, pudo habernos matado”.