Tres individuos investigados por un doble homicidio, que se hallaban presos en la cárcel El Roble de Puntarenas, estuvieron libres el pasado martes, apenas cinco minutos, pues agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) los esperaron fuera del penal para recapturarlos.
Los sospechosos, de apellidos Guerrero, Torres y Navarro, descontaron tres meses de prisión preventiva desde setiembre por el homicidio del canadiense Jacques Cloutier, de 59 años, y del nacional Luis Antonio Angulo Díaz, de 70.
Las víctimas aparecieron ultimadas el 14 de mayo dentro de un vehículo, marca Toyota Prado, de un balazo en la cabeza y en la nuca, en Quebrada Amarilla de Jacó, en Garabito.
Sin embargo, los tres sospechosos del crimen fueron liberados este martes por orden del juez Hernán Salazar, del Juzgado Penal de Garabito, quien alegó que la Fiscalía había hecho una mala fundamentación para prorrogar la prisión. Aun así, les impuso algunas medidas cautelares.
Guerrero, Torres y Navarro fueron llevados ayer nuevamente a una audiencia ante el mismo Juzgado, que finalmente impuso cuatro meses de prisión preventiva.
Esta vez, la Fiscalía aportó pruebas suficientes y logró demostrar que, si se les dejaba en libertad a los tres hombres, habría el peligro de que se fugaran para evadir el proceso judicial.
El defensor de los sospechosos interpuso un recurso de hábeas corpus ante la Sala Constitucional, tras la recaptura de los sujetos porque había una orden de ponerlos en libertad; sin embargo, el juez señaló que la Fiscalía tiene la potestad de detener a cualquier ciudadano, si tiene fundamentos.
Móvil del crimen. De acuerdo con los informes del OIJ, el homicidio de Cloutier y Angulo ocurrió porque Guerrero, supuestamente, le había vendido ganado al canadiense, quien le pagó una suma de dinero, pero nunca recibió las reses.
Al parecer, Guerrero se alió con Torres y Navarro para matar a los dos hombres.
Cloutier vivía solo y era presidente de cinco sociedades anónimas que se dedicaban a la ganadería. Angulo había sido empleado suyo.
Los sospechosos del doble homicidio fueron detenidos la primera vez durante varios allanamientos en Ipís de Goicoechea y Mata de Plátano de Turrubares, San José.