San José (Redacción). Una psicóloga del Ministerio de Seguridad Pública (MSP) de apellido Castro estuvo detenida 24 horas debido a una investigación que se sigue en su contra por el delito de falsedad ideológica.
Castro es sospechosa de cometer irregularidades, en el ejercicio privado de su profesión, con la emisión de certificados de idoneidad mental para portar armas de fuego.
El arresto de Castro se realizó ayer por la mañana en su oficina privada en las inmediaciones de Los Tribunales de Justicia en San José, debido a que se encontraba de vacaciones en el MSP.
Osvaldo Henderson, fiscal adjunto de Fraudes, confirmó que el Ministerio Público solicitó ayer prisión preventiva contra la psicóloga pero un juez ordenó su liberación y le dictó medidas cautelares como impedimento de salida del país y firmar cada 15 días en una sede judicial.
La oficina de prensa del OIJ detalló hoy que la psicóloga firmó cientos de certificados, al parecer, sin evaluar a las personas. Luego los documentos eran comercializados en armerías.
Un reportaje de La Nación, publicado el 24 de octubre, reveló que Castro hizo 7.039 evaluaciones entre el año 2007 y setiembre del 2011, lo que la convierte en la psicóloga que más pruebas realizó en ese período en el país. El OIJ estima en ¢206 millones el valor de los certificados que emitió.
La sospechosa reportó, en promedio, cuatro certificados diarios como psicóloga privada a pesar de que labora ocho horas en el MSP y es docente universitaria.
Según el Colegio Profesional de Psicólogos, cada examen de idoneidad mental debe durar como mínimo tres horas, lo que significa que Castro debía dedicar 12 horas diarias los 365 días del año para tener las 7.039 evaluaciones.
La cantidad de certificados de Castro motivó al Colegio de Psicólogos a presentar una denuncia ante la Procuraduría de la Ética la cual fue tramitada en el expediente DEP-61-2001. La investigación preliminar de la Procuraduría generó en setiembre el informe N.° 012-2011 que fue remitido al MSP. El reporte recomendó la apertura de un procedimiento administrativo en contra de la funcionaria. Antes de su arresto, La Nación contactó con Castro en dos oportunidades vía telefónica. En ambas declinó dar declaraciones.