Un menor de tres años murió ayer en la Clínica de San Rafael de Heredia y la Policía detuvo a su madre y al padrastro como los supuestos responsables del deceso.
La muerte del niño ocurrió dos días después de que había salido del Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia, donde estuvo internado junto con un hermano por padecer ambos el síndrome del niño agredido.
El menor llegó a la Clínica de San Rafael en un vehículo particular, acompañado por su madre y el padrastro.
La mujer y el hombre dijeron a los médicos que el chiquito salió corriendo cuando ellos se disponían a bañarlo, se desvaneció y se golpeó la cabeza.
El profesional indicó que apenas ingresó el niño lo entubaron, le dieron ventilación e iniciaron el protocolo de resucitación.
Después de realizarle maniobras de resucitación durante 40 minutos, fue declarado muerto.
Barrantes contó que cuando consultaron a la madre, ella adujo que el niño se desvaneció de un momento a otro cuando lo iban a bañar.
La progenitora aseguró que al escuchar el golpe ella se asomó y vio a su hijo tendido en el suelo.
Barrantes confirmó que el menor de tres años y su hermano menor habían salido dos días antes del Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia, y que presentaban un cuadro de agresión.
Agregó que tras un análisis de la oficina de Trabajo Social del hospital, se les dio de alta y regresaron a su casa en compañía de sus padres, ahora detenidos.
Al parecer, la Policía cuenta con algunos testimonios de vecinos que confirman que el menor fallecido y su hermano sufrían frecuentes agresiones.