San José (Redacción). Los costarricenses volvían poco a poco a la calma esta tarde, tras la conmoción provocada por un terremoto de 7,6 Mw (magnitud momento) con epicentro en la península de Nicoya.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) declaró alerta roja para todo el país, mientras se evaluaban los daños en distintas comunidades, especialmente en Guanacaste. Registros de la Red Sismológica Nacional ubican al sismo de hoy como el segundo más fuerte que ha sufrido Costa Rica en su historia reciente, solo superado por el terremoto de Limón, de 1991, de 7,7 Mw.
Comunidades de Hojancha, Nicoya, Nandayure y Santa Cruz sufrieron la caída de casas y daños en infraestructura pública, dado que la fuerza del sismo habría elevado hasta un metro a la península de Nicoya.
Las autoridades confirmaron la muerte de una mujer en Guanacaste, tras sufrir un ataque cardiaco por la impresión. Pacientes del hospital Monseñor Sanabria, en Puntarenas, fueron trasladados a otros centros de salud, luego de que las autoridades evacuaran el edificio porteño, ante los evidentes daños en su estructura.
La Caja de Seguro Social reportó que sus demás hospitales funcionan con normalidad, aunque pacientes sin padecimientos graves fueron dados de alta como medida de precaución.
En Valverde Vega, las autoridades municipales reportaban serios daños en más de una docena de viviendas, mientras que vecinos de distintos poblados de Sarapiquí quedaron incomunicados por la destrucción del puente sobre el río Sucio.
La presidenta Laura Chinchilla se trasladó a la sede de la CNE, desde donde hizo un llamado a la calma y siguió de cerca los reportes enviados desde las zonas más afectadas.
Servicios bancarios y de comercio se reestablecieron a las pocas horas del sismo, a pesar de que se han experimentado más de 75 réplicas, muchas de ellas imperceptibles.
Debido a la fuerza del temblor, la estructura que se instalaba en el estadio Ricardo Saprissa para albergar el próximo sábado un concierto de música de los 80 fue dañada. Los organizadores anunciaron la cancelación del espectáculo.