El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) archivó desde el 3 de febrero del 2010 el caso de Juan Manuel Barquero, el menor que apareció sin vida ayer, luego de que la abuela materna se responsabilizó por el cuido del pequeño.
Ilse Trejos, abogada del PANI, señaló que, en ese momento, un funcionario de la institución aseguró que el infante no se encontraba en situación de riesgo.
Según Trejos, en el expediente consta esta declaración de la abuela: “Mi hija estuvo internada en el Hospital (Nacional) Psiquiátrico y egresó en setiembre. Durante los internamientos, me he hecho responsable de mi nieto.
”Mi hija ahora vive conmigo y estoy pendiente de ella. Me comprometo a que si veo alguna situación la manifestaré al PANI”.
Trejos manifestó que desde aquel entonces hasta el pasado 9 de marzo, cuando el padre y la abuela denunciaron la desaparición, la familia nunca alertó sobre alguna situación irregular.
El 1.° de octubre del 2009 el Hospital Nacional Psiquiátrico remitió el caso al PANI al aducir que la madre de Juan Manuel estuvo internada desde el 27 de agosto por una descompensación mental.
La mujer, de apellido Madrigal, solicitó ante un Juzgado en ese momento que el padre, Sergio Barquero, saliera de la casa y que no se acercara a la familia. Sin embargo, luego pidió archivar el caso.
En octubre del 2008, Madrigal pidió y logró las mismas medidas de protección, que se mantuvieron durante seis meses. Juan Manuel tenía un año, en esa ocasión.
Luego, el padre del menor solicitó medidas de protección contra la mujer durante tres meses para que no se le acercara, ni lo perturbara.
Como la pareja estaba separada, Barquero acudió al Juzgado de Familia de San José, en abril del 2010, para tramitar un régimen de visitas. Así se resolvió que él podía ver a su hijo de viernes a domingo.
Barquero también comunicó al Juzgado que la mujer tenía problemas de esquizofrenia.
El padre no volvió a gestionar medidas cautelares ni la custodia provisional del menor hasta el 16 de marzo anterior.
La funcionaria aseguró que el papel del padre era periférico, pues, según manifestó la abuela del niño, era el proveedor.
“El papá nunca se acercó a esta oficina”, señaló Trejos. El 9 de marzo, día en que Madrigal se llevó a su hijo de tres años, el padre llegó con la abuela al PANI para pedirles que intervinieran.
Según dijo Trejos, ambos estaba preocupados. El personal del Patronato les dijo a los familiares que debían plantear primero una denuncia ante el OIJ para reportar la desaparición.
La madre de Juan Manuel se encuentra internada en el Hospital Nacional Psiquiátrico desde el miércoles. Ayer, fue enviada a la Unidad de Cuidados Intensivos de ese centro médico, pues amenazó con quitarse la vida.
Max Aguilar, padrino del pequeño fallecido, dijo ayer a
Rigoberto Castro, psiquiatra, explicó: “La esquizofrenia es un enfermedad crónica. Provoca conductas individuales que pueden ser agresivas o depresivas. Hay ideas delirantes de que alguien, una voz, controla a la persona y les dice, por ejemplo, que atenten contra su vida”.