Dos sujetos acusados de integrar una banda robacarros quedaron en libertad hace más de un mes porque la fiscala encargada del caso olvidó asistir a la audiencia para solicitar a un juez la prórroga de prisión preventiva.
Según confirmó la oficina de prensa del Ministerio Público ante una consulta de La Nación , la funcionaria es Bianca Wiciak, quien labora en la Unidad de Sustracción de Vehículos.
Los dos imputados, de apellidos Castro y Torres, ingresaron a prisión desde el 30 de noviembre del 2011 cuando fueron capturados en Hacienda Vieja de Curridabat, San José, por haber robado dos automóviles y privar de libertad a dos personas.
Sin embargo, dejaron la cárcel el 1.° de agosto porque la representante del Ministerio Público no se presentó a la audiencia ese día.
Según reconoció Wiciak, por medio de la oficina de prensa, hubo un error en el control de las prórrogas de prisión preventiva que ella llevaba desde diciembre del 2011.
Explicó que a los imputados inicialmente les impusieron tres meses de prisión el 1.° de diciembre del 2011; y el 1.° de marzo, otros tres meses. No obstante, en la audiencia del 1.° de junio, el juez redujo el plazo a dos meses.
La fiscala debía solicitar la ampliación de la medida cautelar antes del 1.° de agosto, pero no hizo el trámite correspondiente.
El fiscal adjunto Wálter Espinoza envió el caso de Wiciak a la Inspección Fiscal, para que indague sobre lo ocurrido. Ayer, la Fiscalía dijo que solicitó una audiencia al Juzgado Penal de San José para solicitar medidas cautelares para los dos imputados, pero se desconoce cuándo será.
Operativo. Los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) también aprehendieron la madrugada del 30 de noviembre a otros dos presuntos miembros de la banda criminal, de apellidos Bejarano y Benavides, quienes descontaron prisión al inicio del proceso, pero un juez los dejó en libertad después.
Según la pesquisa, ellos se hacían pasar por policías para robar vehículos mediante el método del bajonazo.
Las detenciones ocurrieron luego de que los agentes siguieran a los sospechosos, quienes viajaban a bordo de un auto marca Renault Megane, que fue robado un mes antes en Escazú.
Cuando los sospechosos iban por Hacienda Vieja de Curridabat, entraron en forma violenta en el vehículo, marca Toyota Rav4, de una pareja de extranjeros.
Sin embargo, el chofer del Rav4 forcejeó dentro del carro con los ladrones, quienes intentaron dispararle, por lo que perdió el control del vehículo y este volcó.
Según explicó el OIJ, en ese momento los policías bloquearon el vehículo en el que iban los imputados cuando cometieron el bajonazo a la pareja.
Tras un intercambio de balazos, los policías detuvieron a un primer sospechoso en el Megane, mientras los otros tres fueron aprehendidos en un río por donde intentaban escapar.
El líder del grupo, de apellido Castro, había sido capturado en el 2010 por el mismo delito.
A ellos se les decomisaron chalecos antibalas, radios de comunicación, tres armas de fuego y luces giratorias.