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Un aposento contiguo al puesto fronterizo en Delta Costa Rica sirvió como sala de parto improvisada. | REINER MONTERO.
Corresponsal GN San José (Redacción). Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Guápiles investigan la muerte de un recién nacido, ocurrida el domingo contiguo al puesto fronterizo en Delta Costa Rica, en la margen del río San Juan, frontera norte.
Según la versión policial, hacia las 3 p. m. llegó una pareja al puesto de Policía, proveniente de Isla Calero, abordo de una pequeña embarcación a pedir ayuda, ya que la mujer estaba por dar a luz.
Se trata de una mujer nicaraguense, de 19 años, identificada como Margarita Bermúdez Escobar y su compañero, Santos Miranda López (35 años), de igual nacionalidad.
Miranda narró a los agentes judiciales que ellos son vecinos de Isla Calero. Pasado el mediodía, la mujer estaba con dolores de parto, razón por la que tomaron una lancha hasta el puesto policial, a donde llegaría una ambulancia de la Cruz Roja, señaló.
Según dijo, pasó más de una hora y los dolores fueron más fuertes, mientras que la ambulancia proveniente desde Puerto Viejo de Sarapiquí no llegaba.
Por esa razón, la mujer fue asistida por los oficiales de Policía en un aposento del local contiguo a la delegación, el cual sirvió de sala de parto improvisada.
Cuando se inició el alumbramiento, los oficiales se percataron de que el bebé no estaba en la posición adecuada, ya que los pies salieron de primero.
La cabeza del menor se quedó atorada, lo que complicó la labor del nacimiento. Cuando los policías lograron su extracción total, el menor no respiraba, estaba sin vida.
La ambulancia llegó al sitio dos horas después, pero ya era muy tarde. Al sitio se apersonaron agentes del OIJ de Guápiles, quienes se encargaron del levantamiento del cuerpo a eso de las 11:05 p. m.
