Un hombre de apellido Fernández fue detenido ayer por su presunta participación en el asesinato de una bailarina colombiana, cuyo cadáver apareció la noche del domingo en un paraje solitario de Tamarindo de Santa Cruz, Guanacaste.
La información fue confirmada por las oficinas de prensa de la Fiscalía y del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Fernández tiene 33 años y, según la Policía, laboraba como instructor de tenis en un complejo turístico ubicado en playa Tamarindo.
Avanzada la tarde de ayer, permanecía a la orden del Juzgado Penal de Santa Cruz, acusado inicialmente de homicidio calificado.
La Fiscalía atribuye a Fernández el homicidio de Leady Castillo Riasco, de 24 años, quien se ganaba la vida como bailarina en un salón nocturno de Tamarindo.
La última vez que la vieron con vida fue el sábado anterior. Según informes en poder del OIJ, estaba en compañía de Fernández quien, creen, la invitó a su casa.
Un testigo, cuya identidad se mantiene en secreto, aseguró a las autoridades haber visto a la suramericana junto al sospechoso.
La vivienda de Fernández ya fue inspeccionada por investigadores judiciales, pero no fue posible conocer si encontraron alguna evidencia relacionada con el crimen.
Castillo fue asfixiada y su cadáver quemado en un paraje solitario de Tamarindo.
La Fuerza Pública detuvo la madrugada del lunes a tres sospechosos de quemar el cuerpo de la mujer, pero posteriormente fueron liberados por falta de pruebas.
Castillo tenía condición de refugiada desde el 2007. Era madre de una niña de ocho meses, quien ayer era cuidado por una vecina.