OIJ condenado por no quitar esposas a abogado detenido

La Sala Constitucional condenó al Organismo de Investigación Judicial (OIJ) por desobedecer la orden de un juez de quitarle las esposas a un abogado detenido durante un allanamiento, lo cual consideró como “cruel y denigrante”.

Así versa el voto de los magistrados N.° 11-14672, del 28 de octubre, tras declarar con lugar un recurso del juez Minor Jiménez, del Tribunal Penal de Hacienda.

El ofendido es un litigante de apellido Vargas, quien fue capturado durante un juicio en el que figuraba como defensor en los Tribunales de Puntarenas el 10 de agosto a las 11 a. m.

Contra él hay una investigación por presuntos contratos ilegales de la Municipalidad de Garabito, en los que, al parecer, hubo sobregiros de dinero.

Tras la aprehensión, los agentes trasladaron a Vargas esposado hacia adelante a su oficina en Jacó, dentro de un cajón policial, para que estuviera presente en el respectivo allanamiento, que se inició pasadas las 4 p. m.

El abogado relató que su traslado duró tres horas. “Debido al tiempo que duré (dentro del cajón de metal), en cierto momento no podía respirar por el calor y golpeaba fuertemente las paredes, pero ellos nunca fueron a revisar.

”Yo me desmayé de camino. Cuando llegamos a Jacó, ellos abren la puerta para ventilarme, y encuentran que estoy totalmente pálido y mojado por el sudor. Un señor de afuera me dio agua”, dijo.

Cuando el juez y los fiscales ingresaron en la oficina, Vargas fue sacado del auto esposado hacia atrás. Una hora después de que se inició la gestión, el abogado pidió al juez Jiménez que se las quitara.

“Para ese momento yo sentía un hormigueo en los brazos porque tenía muchas horas de estar sin buena circulación. Como soy penalista, conozco el protocolo y le dije al juez que había suficientes custodios y yo estaba tranquilo, por lo que podía estar sin esposas”, señaló Vargas.

Ante la solicitud, el juez Jiménez resolvió despojar de las esposas al encartado. Sin embargo, uno de los oficiales, apellidado Tosso, se negó a cumplir con la gestión.

Arbitrario. De acuerdo con los informes presentados ante la Sala IV, el agente Tosso y su compañero de apellido Monge decidieron mantener al abogado con las esposas al alegar peligrosidad.

Según el informe del OIJ, en la oficina había colgados en la pared títulos de manejo de armas y defensa personal del detenido, lo que pondría en riesgo la integridad de los presentes en esa oficina.

Jorge Rojas, director del OIJ, dijo ayer a La Nación: “Siempre acatamos las órdenes de los jueces. En este caso, los agentes estimaron que era riesgoso, pero ahí hay un problema de desobediencia. Hay que ver si (el juez) lo ordena (quitarle las esposas) con conocimiento de causa y bajo su responsabilidad. Ese tema crea una incertidumbre a los agentes”.

El miércoles, la jefa de la Defensa Pública, Marta Iris Muñoz, denunció que el OIJ realiza arrestos arbitrarios en personas que no son peligrosas. Ante tal declaración, Rojas indicó que enviará a la Corte Plena el protocolo para que sea revisado.