Un niño de dos años murió ayer a las 11:25 a. m. en el Hospital Nacional de Niños (HNN), adonde lo trasladaron después de que cayó a una piscina en una residencia en Santa Ana, San José.
El director del HNN, Rodolfo Hernández, dijo que el menor ingresó en paro cardiorrespiratorio y durante 25 minutos se le practicaron ejercicios de resucitación, pero no respondió. “Lo sacan de la piscina en paro cardiorrespiratorio, se lo traen dándole masajes; aquí siguen los masajes. El niño, para propósitos reales, llegó muerto al Hospital”, explicó .
La alerta por este caso la recibió la Cruz Roja a las 10 a. m. Paramédicos de la sede de Belén (Heredia) llegaron hasta la residencia, estilo quinta, en Santa Ana, donde encontraron al menor fuera del agua en ese momento.
Sin embargo, familiares les contaron que en determinado momento el niño se perdió, lo comenzaron a buscar hasta que lo encontraron 10 minutos después de desaparecido. Cuando lo hallaron, estaba flotando en la piscina, comentó la familia a las autoridades.
Los padres del niño fallecido son de origen nicaraguense y se dedican a vigilar la propiedad. La familia tenía tres niños.
Rodolfo Hernández dijo que este tipo de situaciones son preocupantes, porque en lugares donde hay una piscina el cuido de los niños debe ser muy estricto, “para que esto no ocurra, pero sigue ocurriendo”.
Señaló que es el segundo caso de un niño que cae al agua en circunstancias similares. El primero sucedió el 3 de julio con un pequeño de un año y cinco meses que cayó a una pila de tilapias; lo sacaron de inmediato y logró recuperarse. Ese niño ya esta en su casa.