El nombramiento de seis magistrados suplentes en la Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia permitió el año pasado agilizar la resolución de los casos penales impugnados en esa instancia.
Ese fue uno de los logros que recalcó ayer el presidente de esa sala, José Manuel Arroyo, al realizar la rendición de cuentas del 2012.
Según manifestó Arroyo, la carencia de esos jueces imposibilitaba fallar los recursos en los que los magistrados titulares tenían impedimento legal para participar.
“El año anterior pudimos contar con una planilla de suplentes que no tuvimos durante el 2011. Entonces, los magistrados titulares empezaron a atender los casos nuevos”, señaló el juez.
Durante el 2012, la Sala de Casación Penal resolvió 1.767 asuntos (67% del total circulante), mientras que en el 2011 hubo 1.385 expedientes resueltos.
Arroyo reconoció que el avance también se debió a la creación de los nuevos Tribunales de Apelación , una nueva instancia que empezó a regir el 9 de diciembre del 2011, mediante la Ley N.° 8.837.
Según la explicación de Arroyo, la entrada en vigencia de esos tribunales disminuyó los asuntos que ingresan a la Sala Tercera.
Por ejemplo, esa instancia recibió, durante el 2011, 1.532 casos entre recursos de casación, de revisión y de procesos contra miembros de los Supremos Poderes.
Mientras, en todo el 2012 solo ingresaron 1.040 expedientes.
“Efectivamente, como era esperable, al entrar en vigencia esta ley, durante el 2012 ingresó un volumen importante menos de asuntos”, señaló Arroyo.
Agregó que, no obstante, el funcionamiento del nuevo sistema requiere que las partes involucradas comprendan bien el proceso.
“Cuando nosotros planteamos esta reforma, previmos que habría un par de años de transición, en los que quienes activan estos mecanismos de impugnación; es decir, los defensores públicos y privados, y los fiscales, deberían ir comprendiendo el carácter ahora extraordinario del recurso de casación”, expresó Arroyo.
En total, la Sala Tercera finalizó el 2012 con un circulante activo de 840 expedientes.
Tiempos. El informe de la Sala también destacó que el tiempo para señalamiento de audiencias orales se redujo de 57 días, que tardaba en el 2009, a un día en el 2012.
Sin embargo, el tiempo para resolver revisiones y casaciones se incrementó. De acuerdo con Arroyo, eso se debió al acumulado por falta de magistrados.