Es abogada y dirige Migración y Extranjería desde junio del 2010. Anteriormente, laboraba en la Defensoría de los Habitantes. El viernes 7 de diciembre se le ordenó irse de vacaciones desde ese mismo día y hasta febrero. Ella dice tener muchas interrogantes sobre esa disposición, pues cree que no se le han dado todas las explicaciones. De eso, conversó ayer, desde su casa, con La Nación.
El viernes pasado, la directora de Migración, Kathya Rodríguez, recibió una comunicación por parte de la viceministra de Gobernación, Marcela Chacón, en la cual se le indicaba que, por orden del ministro Mario Zamora, debía irse de vacaciones ese mismo día y hasta el 1.° de febrero. La nota señalaba que tenía días de descanso acumulados. Ayer, aseguró que la disposición la tomó por sorpresa. Dijo creer que hay “otras consideraciones de fondo”.
¿La tomó por sorpresa la orden de irse de vacaciones?
Me causó mucha sorpresa, considerando que ese viernes yo vine al país a las 8.30 a. m. por indicaciones tanto del ministro como de la señora viceministra. Yo estaba en Panamá. A las 9:30 a. m. llegué a mi oficina y me encontré eso. Si se fija, es a partir de ese mismo día, al mediodía. O sea, me dieron dos o tres horas para llegar a mi oficina a poner las cosas, recoger lo mínimo y me sacaron por un mes y medio, sin previo aviso, sin planificación, y, además, en plena temporada alta para Migración.
¿Qué hizo? ¿Se comunicó con el ministro?
No me comuniqué con el señor ministro, y aquí quiero decir que, lamentablemente, al señor ministro tengo varios meses de pedirle una cita. Hemos tenido algunas diferencias que le he pedido conversar. Nunca me atendió. Y finalmente, recibí una indicación de que me atuviera a reunirme con la señora viceministra (...). Lo que hice fue presentar un recurso de reconsideración.
¿Hace cuánto no tiene comunicación directa con él?
Le vengo pidiendo una cita para hablar personalmente desde hace unos cinco meses.
¿Cree que la orden se debe a las diferencias con el ministro?
Le voy a ser honesta, por la forma en que se da, no puedo evitar pensar que hay más motivos, que hay otras consideraciones de fondo. Lamentablemente, no se me indicaron. Por otra parte, inmediatamente después de mi salida, se suscitan cambios en mi despacho.
¿Qué cambios?
Mandaron de vacaciones a mi jefa de despacho, movieron de sitio físico al director administrativo. Entiendo, porque no me consta, que mi oficina está ocupada. Si mi salida es por vacaciones, creo que la mínima consideración sería respetar los espacios de cada quien.
¿Cuáles son las diferencias que ha tenido con don Mario Zamora?
(...) La práctica de don Mario ha sido dar instrucciones específicas sobre la institución, que, siendo él exdirector de Migración, al principio, me parecía una conducción positiva para darles continuidad a los procesos que él había empezado. Pero también recibí instrucciones en las que, por oportunidad, o conveniencia, yo tenía otro criterio. Por ejemplo, el tema de los transitorios, esa fue una forma de llamar a una regularización de la población extranjera, pero que tiene que ser ordenada. Entonces, se planificó que los tres primeros serían hasta el 17 de noviembre y los laborales al 17 de febrero. No obstante, sin darme motivos, él me manifestó su interés de que lo prorroguemos, yo le pedí que lo reconsiderara porque esto nos ha implicado muchas horas extra (...). Sin embargo, solo se me dice: ‘Hágalo’. Entonces, por escrito, yo me separé de ese criterio. También tuvimos diferencias sobre la gestión presupuestaria.
¿Sobre si hay subejecución?
Sí, yo sé que eso es parte de lo que él anda hablando. Ahora, ahí es importante preguntar por qué no se ejecuta un presupuesto. Todo tiene una explicación administrativa.
¿Cree que la separarán definitivamente del cargo?
Viendo esa nota y haciendo una lectura del contexto, uno no puede pensar ingenuamente. Para mí, mis vacaciones son una cortina de humo. Yo me pregunto, ¿por qué en este momento?, ¿por qué en este época?, ¿por qué, siendo un tema tan delicado, no me han respondido la reconsideración?
Cuándo usted tomó el cargo, en el 2010, el ministro dijo que usted era una persona de moral intachable. ¿Se le ha pedido que haga algo que no sea correcto?
Yo creo que, quien me conoce, no podría tener la intención ni hacer ninguna manifestación al respecto. Además, he puesto las denuncias sobre las situaciones en la institución que no me han parecido correctas.
¿Tienen que ver esas denuncias con su salida?
No le podría decir, sería especulativo.
Si, eventualmente, la separan definitivamente del cargo, ¿está tranquila de que no es porque haya fallado en su gestión?
Para nada (...). Había y hay mucho que hacer, pero, mi intención siempre fue trabajar.