El Juzgado Penal de Pavas impuso anteanoche seis meses de prisión a un guachimán, de 25 años, buscado por la Fiscalía como sospechoso de asesinar a los rivales del Indio que operaban en Desamparados.
La oficina de prensa del Poder Judicial informó de que se trata de un individuo de apellido Quesada, quien se entregó el lunes, cuando se presentó ante la Fiscalía. A este sujeto, conocido como Chino Kennet o Chino Grande, se le abrió una causa por el delito de tráfico de drogas y homicidio.
Para la Fiscalía de Crimen Organizado, Quesada era uno de los miembros de la banda del Indio, un hombre de apellido Zamora, a quien se le atribuye controlar el tráfico de drogas en Desamparados y de, al parecer, mandar a matar a rivales que intentaban ingresar en su territorio con la venta de drogas. Según los informes judiciales, durante una indagatoria realizada en la Fiscalía y posteriormente en una audiencia en el Juzgado Penal de Pavas, Quesada rechazó los cargos que se le atribuyen y prefirió guardar silencio cuando se le preguntó sobre los delitos.
Quesada enfrentó años atrás un juicio penal cuando fue detenido en el 2008 con un arma de fuego sin tener los permisos para portarla.
Por ese caso se le impuso cumplir con trabajo comunal, pero la pena fue apelada y se encuentra en trámite en el Tribunal Penal de Desamparados.
Zamora es investigado por la Policía Judicial desde el 2008 por homicidios ocurridos en Desamparados y Goicoechea, pero nunca logró relacionarlo con esos hechos. Fue este año cuando, con seguimientos, lo detuvieron con evidencia.