Un guarda de seguridad de la Confederación de Trabajadores Rerum Novarum (un grupo de 75 sindicatos) apareció degollado ayer en el comedor de las oficinas, ubicadas en barrio Escalante, distrito Carmen, San José.
El oficial fue identificado por sus compañeros de trabajo como Minor Manuel Fioravanti Castro, de 46 años, quien era vecino de Aserrí. Él laboraba en ese edificio de noche, en temporada de diciembre, e inició sus tareas el viernes.
Uno de los secretarios de la Confederación, Tyronne Esna, fue el primero en llegar al edificio ayer cerca de las 9 a. m. y observó las puertas entreabiertas, lo que le pareció sospechoso.
Al ingresar, se dio cuenta de que había mucho desorden, gavetas abiertas y en su oficina faltaban dos cámaras digitales, una computadora portátil, un televisor y un proyector multimedia. Por eso llamó a la Policía.
Esna avisó a un comerciante del barrio, Gerardo Vargas, quien entró a las oficinas y halló el cadáver de Fioravanti tirado en el comedor.
Según recordó, el guarda estaba boca arriba, sin camisa, pantalón ni zapatos y ensangrentado. Solamente vestía un bóxer.
Fioravanti laboraba de día como guarda en un edificio de oficinas ubicado frente la Confederación sindical.
Agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) se encargaron de custodiar el sitio para recolectar evidencias y determinar las causas del crimen.
Esna recordó que hace seis años un grupo de asaltantes ingresó al edificio de la Confederación y maniató a sus empleados durante dos horas, para luego robarles sus pertenencias.