Fotografas del grupo armado que se mantiene el 13 de enero del 2011 atrincherado en una casa de una finca ubicada en el sector de Rincn de Drake. Fotos Mayela Lpez
La madrugada del lunes, los desconocidos –vestían ropa militar (fatiga) y portaban armas de gran tamaño– ingresaron al terreno a eso de las 4 a. m. y amenazaron al cuidador, José Ángel Gómez Jiménez (alias
Gómez cuida esa propiedad desde hace unos cinco años. Él contó a sus vecinos que lo agredieron e incluso encañonaron a sus hijos de 5 y 10 años.
“A
El rumor corrió como pólvora. Asustados, los lugareños vieron cómo hombres armados se paseaban, desafiantes, por la finca.
El terreno es objeto de una disputa entre dos extranjeros. “Esta tierra perteneció a un tío. Lo compraron dos extranjeros hace ocho años. Se supone que está dividido. Entre ellos ha existido un diferendo”, explicó el botero Orlando Mora, un vecino de Drake de Osa.
Dos estadounidenses de apellidos Balford y Johnson reclaman su derecho de posesión de esa tierra, situada al extremo más lejano de Rincón.
Francisco Segura, subdirector del OIJ, indicó ayer que a su conocimiento no llegaron los supuestos maltratos en perjuicio del guarda pues Gómez no denunció la agresión.
Sin embargo, algunos vecinos hablaron de la presencia de “un comando”. Hasta ayer se desconocía si este grupo de hombres armados está conformado por costarricenses o extranjeros.
La cantidad de hombres (de 15 a 20) preocupó a las autoridades, que incluso barajaron la posibilidad de enviar a sus equipos de choque.
Ayer un equipo de
Parte del grupo armado visita con frecuencia un abastecedor ubicado en Los Planes de Drake.
“Vienen a comprar cigarrillos y golosinas. Usan ropa gris, de tipo militar. Son muy reservados”, dijo Érick Jiménez, dependiente de Licorera 32.
Algunos de ellos se han paseado por esa localidad con sus armas al hombro. Ayer aumentó un poco la cantidad de oficiales de la Fuerza Pública en retenes de carretera, pero no se vieron los agentes del OIJ en la zona. “Esta investigación apenas comienza”, advirtió el subdirector del OIJ, Francisco Segura.