El Ministerio Público pidió ayer que se imponga una pena de 10 años de prisión al presidente del Limón F. C., Carlos Howden Pascall.
La petitoria la hizo la fiscala Natalia Sarkis en la etapa de conclusiones de un juicio en que al imputado se le atribuyó el delito de legitimación de capitales.
La representante del ente acusador del Estado también pidió que se confisquen el dinero y las propiedades de Pascall, o que están a nombre de sociedades en que aparece como socio.
Juan José Picado, codefensor del implicado, consideró que la Fiscalía no hizo el análisis requerido para demostrar que el dinero proviene de actos ilícitos.
“Siempre hemos mantenido que Carlos (Pascall) no tuvo conocimiento de que esos dineros eran ilícitos y, más bien, pensó que eran de la venta de cigarrillos en la reserva indígena, que es una actividad lícita”, manifestó.
Agregó que todos los fondos se los envió Rodney Arnoldo Morrison (hermanastro de Pascall) por medio de transferencias bancarias desde Estados Unidos.
La fiscala dijo que Morrison está detenido desde el 2 de agosto del 2004 en Estados Unidos porque allá se le investigó “por cometer actos ilícitos como robo, homicidio por encargo e incendio” para incrementar las ganancias de su empresa, dedicada a la venta de cigarrillos en una reserva indígena.
Precisó que un jurado lo declaró no culpable de los delitos y se le condenó a 10 años por portación de arma. Empero, agregó que en un fallo de julio pasado de la Corte de Apelaciones –aportado como prueba para mejor resolver– determinó que Morrison debe ser condenado por contrabando por esa venta de cigarrillos.
Dijo que de esa manera queda demostrado que el dinero tiene una procedencia ilícita, y argumentó que Pascall “sabía esa situación” y, al comprar carros y propiedades, trató de ocultar el origen del dinero.