El fiscal general Jorge Chavarría pidió a sus subalternos determinar si es posible investigar a otras personas –ajenas a las dos llevadas a debate– por el homicidio del empresario periodístico José Andrés Borrasé Taylor.
Hasta hace tres semanas, las sospechas recaían sobre Laureano Montero Romero (condenado en 1999 a 25 años de cárcel) y su entonces compañera, Magdalena Pacheco Bolaños (absuelta el pasado 26 de noviembre).
Sin embargo, Chavarría confirmó a
Los informes se basan en la investigación llevada a cabo por el exjefe de delegación del OIJ, Fernando Sánchez Chacón.
La Fiscalía ahora no solo debe determinar si existen pruebas en contra de esas personas –cuyas identidades mantiene bajo reserva este medio–, sino también si el caso está prescrito.
“Lo que se me insinúa es que, de acuerdo con esa investigación, podría haber responsabilidad penal de otras personas.
“Lo envié a la fiscala Paula Guido para que ella valore y haga algunas constataciones. Ella decidirá si abre la investigación y si se dirige en esa vertiente”, explicó Chavarría.
“Cometieron un error al acusar a la principal testigo”, advirtió.
El exoficial no solo señaló algunas falencias de la pesquisa –algunas pruebas desaparecieron, los agentes siguieron una línea de investigación y abandonaron otras, los sujetos citados por Sánchez nunca despertaron sospechas, pese a sus contradicciones–, sino que entrevistó a nuevos testigos.
Por ejemplo, conversó una vecina de Colima de Tibás, quien asegura que, en la época del crimen, alquilaba un carro a los sospechosos. Ella recordó que, tras el homicidio, los sujetos se veían asustados.
La pesquisa no libra a Montero del homicidio, pero pretende llegar hasta las personas que colaboraron con el crimen.
En la escena del crimen la Policía recogió elementos pilosos que no correspondían ni a Borrasé, ni a Montero ni a Pacheco.
En aquel entonces, el OIJ no disponía de laboratorios para tales pruebas, pero la Fiscalía tampoco aceptó el ofrecimiento de uno privado.
“La Fiscalía, de forma unilateral y sin razón, desistió de esa prueba”, explicó la abogada Rodríguez. Para Sánchez, eso era clave. En caso de que se abra una pesquisa, esta irá dirigida a un abogado y unos expolicías.