Cae en Francia etarra que planeó matar a Edén Pastora en Escazú

Un integrante de la organización terrorista española ETA, quien hace casi 30 años intentó matar en Escazú al exguerrillero nicaraguense Edén Pastora, cayó ayer en un pueblo de Francia donde se ocultaba.

Gregorio Jiménez Morales, alias el Pistolas, era buscado por un fallido atentado que tenía como objetivo derribar, en el 2001, el avión en el que viajaba el entonces presidente del Gobierno de España, José María Aznar.

El diario español El País informó de que el Pistolas, de 56 años, fue la persona que introdujo en ese país un lanzamisiles de fabricación rusa. El arma no funcionó.

Ayer, el Comandante cero –como era conocido Pastora en las filas de la guerrilla nicaraguense de los años 80– recordó el plan terrorista en el que figuró como objetivo.

“Yo solo supe lo que salió en la prensa esos días. Tenían un operativo listo para eliminarme.

“Iba a ser (el atentado) en Escazú. Me tenían a tiro con un cañón de 57 milímetros (antiaéreo) que tenían en un cuarto desde el que se veía mi casa”, explicó.

Pastora señaló al Pistolas como la persona que estaba a cargo del comando. El plan no llegó a concretarse debido a que las autoridades se adelantaron y detuvieron a los sospechosos.

Liberados. Para principios de los 80, Gregorio Jiménez formaba parte de un comando de ETA llamado “Andatza”. Para evitar su captura, viajó a Suramérica, donde tuvo contacto con grupos rebeldes.

El fallido atentado contra Pastora ocurrió en 1983. “Los costarricenses (la Policía) los dejaron ir para no tener problemas.

“No pudieron ejecutar el plan. No hay ley de la física que me explique por qué estoy vivo. Varias veces intentaron matarme”, agregó el Comandante cero.

Pastora considera que ETA intentó cometer el atentado en solidaridad con el Frente Sandinista, contra el que luchaba la contra nicaraguense. “Esa es la impresión que siempre tuve”, agregó.

El exguerrillero sobrevivió a otro atentado. El 30 de mayo de 1984, siete personas –entre ellas, Jorge Quirós, camarógrafo de canal 6, el chofer Evelio Sequeira (de ese mismo medio) y la periodista del Tico Times, Linda Frazier– fallecieron al estallar una bomba en la casona donde tenía lugar una conferencia de prensa con el líder de la Alianza Revolucionaria Democrática (ARDE), fundada para combatir el sandinismo.

Caso de La Penca. En días pasados, el Colegio de Periodistas solicitó al fiscal general, Jorge Chavarría, información sobre las pesquisas.

“No existe una posibilidad real de que el caso avance en el futuro, dado que la identidad legal del perpetrador no ha sido establecida con claridad”, respondió el Fiscal.

Raúl Silesky, presidente del Colegio, indicó que de esas declaraciones se desprende que las víctimas no recibirán justicia, por lo que elevaron una nota a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

“Es la primera vez que el Estado costarricense, de manera explícita, admite que en este caso no habrá una resolución que permita a las víctimas y a la sociedad saber qué pasó”, señaló Silesky.