Aviación Civil impidió el vuelo de una aeronave que la noche del lunes solicitó permiso para traer desde Liberia a un turista estadounidense, accidentado en aguas del río Cañas.
Ese día, la rama de un árbol cayó sobre la cabeza de Douglas Swenson Chad –de 37 años– y le produjo una grave fractura en el cráneo. El turista, originario de Houston, Texas, vino con su esposa para hacer
Swenson fue trasladado en condición crítica al hospital Enrique Baltodano, en Liberia.
Su compañía aseguradora aceptó el traslado a Estados Unidos y por eso la doctora Mónica Guardia coordinó su envío a San José.
La familia del turista contrató al personal médico de la empresa Central America Lice Flight para que se encargara de movilizarlo, pero la aeronave alquilada a la compañía Nature Air nunca pudo despegar del aeropuerto Tobías Bolaños, en Pavas.
Aviación Civil no autorizó el vuelo, pues pasaban de las 6 de la tarde. “Está bien que tomen medidas de seguridad, pero no en detrimento de una vida”, comentó el paramédico Ricardo Hernández.
Al final, Swenson fue trasladado por tierra al Hospital Cima, donde fue operado poco después de las 3 de la mañana del martes.
“En principio, me dieron el visto bueno. Confirmé a los paramédicos que volaríamos.
“En eso me llamó la administración (del aeropuerto) para preguntar que quién había autorizado el vuelo. Les expliqué que era una cuestión humanitaria y hasta ofrecí llevar a un policía”, señaló Malavassi.
Jorge Fernández, director de Aviación Civil, fue quien tomó la decisión de no autorizar el vuelo. “El aeropuerto se cierra después de las 6 de la tarde. Esa regla siempre ha existido, salvo casos excepcionales, debidamente documentados con la referencia del hospital o del médico a cargo”, dijo.