Auditoría del TEC revela despilfarro de fondos públicos

El pago de hospedaje y alimentación para personas que no formaban parte de Fundatec, la cancelación de ¢14,2 millones en horas extras –al parecer no laboradas– al chofer del rector del Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC), cenas y servicios de habitación hasta por ¢6.000.000.

Esas fueron algunas de las razones por las que la jueza penal de Hacienda, Marjorie Valenciano, autorizó que el OIJ allanara, el pasado jueves, varias oficinas del TEC en Cartago.

En la orden de allanamiento, registro y secuestro (La Nación tiene copia), la jueza advirtió que las denuncias recabadas permitieron a la Fiscalía presumir la existencia de varios delitos: peculado, malversación de fondos, abuso de autoridad, enriquecimiento ilícito, reconocimiento ilegal de beneficios laborales, pago irregular de contratos administrativos, administración en beneficio propio e influencia en contra de la Hacienda Pública.

El documento legal cita a varios funcionarios del TEC como objetos de la pesquisa, entre estos al rector Eugenio Trejos.

Caso del chofer. Entre el 2006 y el 2008, el chofer del rector (de apellido Masís), recibió ¢14,2 millones por concepto de horas extras.

La orden de allanamiento indica que Masís labora con exclusividad para el rector.

“Tal monto fue considerado en su momento por la Auditoría como excesivo en relación comparativa del mismo rubro cancelado a otras unidades de la universidad”, razonó la jueza Valenciano.

Por otra parte, la Fiscalía de Fraudes señaló que Eugenio Trejos recibió una remuneración “superior al medio millón de colones” por concepto de ampliación de jornada, pese a que a partir del 2 de octubre del 2009 gozó de vacaciones.

“Implica que el investigado recibió un pago o incentivo económico por un curso que no dio”, acusó el Ministerio Público.

La pesquisa incluye el caso de dos particulares que, sin ser parte de Fundatec (una fundación del TEC), recibieron dinero para alimentación y alojamiento.

Fiestas. Las autoridades también investigan el dinero que se invirtió en agasajos. En el 2007, el director de la Escuela de Administración de Empresas del TEC (de apellido Martínez) autorizó un gasto de ¢6,1 millones por concepto de cena, descorches, gaseosas y servicio de habitación con motivo de la primera graduación.

La orden de allanamiento señala que los pagos superiores a $2.000 deben ser autorizados por el coordinador y el superior jerárquico.

Por su parte, la Escuela de Ciencias del Lenguaje del TEC reportó, el 15 de diciembre del 2007, un gasto de ¢726.000 en una fiesta de fin de año, pero en realidad se gastaron –según el documento– ¢2,3 millones, monto que se cargó a los proyectos de la escuela.

Como parte del programa, se llevó a cabo una visita al zoológico África Mía, en Liberia, que tuvo un costo de ¢1,1 millones. El gasto se cargó a la partida de “actividades de capacitación”.

El Ministerio Público denunció que a la empresa Sasoma el TEC le canceló, el 20 de diciembre del 2007, ¢341.900 por concepto de “Reunión de profesores del Programa de Técnicos en Administración de Empresas”.

“Sin embargo, de acuerdo con la información facilitada, no aparecen documentos que respalden tal gasto, ni justificación alguna del mismo”, detalló la Fiscalía.

La Escuela de Química hizo un gasto de ¢603.900 en diciembre del 2007, “siendo que el 21,2 % corresponde a licores”.