Un joven de 19 años, de apellido Morales, fue condenado a 32 años de prisión por homicidio calificado y la sustracción de un bebé en perjuicio de Evelyn Granda Leiva.
Además, los jueces le impusieron dos años de prisión por el delito de abandono de incapaz.
El Tribunal Penal de Desamparados dictó la sentencia ayer tras determinar que Morales asesinó a Granda para robarle a su bebé de 22 días de nacido, con el fin de dárselo a una mujer de apellido Solís, de 20 años, que fue condenada en noviembre pasado a 20 años de cárcel por homicidio calificado.
El crimen de Granda ocurrió el 7 de enero del 2010. La víctima, de 19 años, apareció sin vida dentro de una bolsa, en las cercanías del río Jorco en Desamparados, San José.
El cuerpo tenía cinta adhesiva en su nariz y la boca tapada, por lo que se presume que fue asfixiada.
Al parecer, Granda fue ese día en la mañana con su bebé a la vivienda de Solís, en San Rafael Abajo de Desamparados, donde le habían ofrecido ropa para su hijo, pero allí la mataron entre los dos.
Al día siguiente, la Policía encontró al bebé en esa vivienda, y a Granda en el río Jorco.