Saprissa y Alajuelense coleccionan y atesoran un sinnúmero de anécdotas tras sus giras al mundo.
Según el periodista e historiador José Antonio Pastor, los dos clubes hicieron sus expediciones a través del promotor Max Gold.
“Él tenía la costumbre de mentir, porque era la única forma de colocar equipos costarricenses en Europa o donde fuera. En 1959 al Saprissa nadie lo conocía y a Alajuelense menos, es más, nadie sabía dónde quedaba Costa Rica”, relató Pastor.
Según él, para concretar los juegos “Gold decía: ‘mire, yo tengo al Saprissa que le ganó al Santos de Brasil con Pelé’, y jamás, más bien, se había llevado una paliza Saprissa, pero como no había Internet, ni forma de corroborar, el hombre sabía vender muy bien los partidos”.
Los jugadores no iban preparados para el frío. Además, en Indonesia, morados y erizos tuvieron problemas porque no encontraban lugares para comer.