Solo un mundial de fútbol se ha realizado en Brasil y su monarca fue Uruguay, por lo que esa selección llega con el objetivo de quedar como la única que ha alzado la copa en tierras cariocas.
No obstante, pasaron casi 64 años desde esa hazaña y los charrúas perdieron ese protagonismo, pero poco a poco lo recuperan. Ya volvieron a ganar la Copa América en el 2011 tras 16 años sin ser campeones en ese torneo, por lo que un nuevo título mundial no suena imposible.
Pero los uruguayos no llegan en su mejor momento, sufrieron de más en la clasificatoria suramericana, quedaron quintos de nueve equipos, y tuvieron que ir a una repesca contra Jordania.
Ahí no quedaron dudas de cuál equipo es mejor y en su visita a las tierras asiáticas golearon 0-5. En Uruguay se conformaron con un empate sin goles para obtener el último cupo al Mundial.
Mas que llegaran por repechaje no es sinónimo de que vayan a hacer un mal torneo. En 2010 llegaron a Sudáfrica por el mismo camino y avanzaron a semifinales, con lo que se convirtieron en el mejor representante de la Conmebol en esa cita mundialista.
Sus mayores figuras se encuentran en el ataque, donde tienen un tridente que se desearía cualquier selección del mundo.
Edinson Cavani y Luis Suárez viven excelentes temporadas en sus equipos europeos y el veterano Diego Forlán demostró en las eliminatorias que aún puede dar actuaciones de lujo en el equipo.
“Inglaterra es un rival que tiene mucho hoy por hoy. Pero nosotros tenemos a Luis Suárez”, expresó el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Sebastián Bauza.
Otro punto a favor de los uruguayos es que su combinado lleva un proyecto duradero que le ha dado grandes resultados.
Su técnico Óscar Tabárez lleva ya siete años al mando y junto a él hay una base de jugadores muy similar a la de Sudáfrica 2010.
Forlán, Diego Lugano, Wálter Gargano forman una base de mucha experiencia que en estos torneos importantes ha mantenido a flote al conjunto.
Esa fuerza ofensiva es su mayor atributo pero se convierte también en su mayor debilidad, ya que suelen recibir bastantes goles.
En la eliminatoria fueron el cuarto equipo más goleado (25 goles) de la Conmebol.