Santos, Brasil. La afición de Brasil está completamente volcada en favor de Costa Rica . Se nota en la calle y se notó también en los estadios durante los cuatro partidos que ya disputó en este Mundial 2014.
No importa, ni importó en qué ciudad estuviese el equipo, siempre fue igual.
Sin embargo, de cara al duelo del sábado, habrá que añadirle a la mezcla que parece que también está en contra de Holanda.
Entonces, aunque el grueso de los espectadores ticos ya haya regreso al país, podría haber paliza abrumadora por lo menos en la gradería de la Arena Fonte Nova de Salvador de Bahía, la cual tiene cupo para 51.900 personas.
Tal aliento llega porque, primero, ven al subcampeón del mundo como una gran amenaza a sus propio sueños del “hexa” y segundo, porque aún hay sangre en el ojo de la eliminación de los cuartos de final en Sudáfrica 2010.
“Costa Rica tiene que ganarle a Holanda. Los queremos fuera. No se nos olvida lo que pasó en el Mundial pasado. Ojalá después en semifinales derroten también a Argentina, que de por sí a ellos, contra el que sea que jueguen, queremos que pierdan”, dijo Thiago, cocinero en un lanchonete , como se les conoce a las sodas, en Santos.
De avanzar de ronda, la Sele se mediría al ganador del choque entre la Albiceleste y Bélgica.
“Todo el que sea brasileño quiere que Costa Rica gane. Son la sorpresa y juegan muy bien; además, la verdad no nos gusta mucho Holanda ni (Arjen) Robben”, expresó Leandro, especialista de sonido en el estadio Vila Belmiro.
“Estaremos apoyando a los ticos todo el partido. Holanda es un equipo difícil, pero pueden vencerlo. Sería bastante lindo una final contra Costa Rica”, expresó Marcos, mesero en un restaurante.