Japón
El ariete uruguayo Diego Forlán disfruta de su nuevo desafío como estrella del Cerezo Osaka japonés mientras tiene la mirada puesta en el Mundial, donde afirma que Uruguay será un rival duro incluso para grandes favoritos como Brasil o España y pone a la Selección de Costa Rica como un rival complicado de enfrentar.
Al hablar de la cita mundilista, Forlán se muestra deseoso de que llegue el Mundial y el período de preparación previa que le espera dentro de cuatro semanas en su país natal.
El delantero rechaza situar a Uruguay dentro del grupo de máximos favoritos —a su juicio, encabezado por Brasil y donde también se ubican España, Alemania, Holanda, Argentina e Italia—, pero advierte de que la celeste será un rival "duro de enfrentar" y que dará "pelea".
Apuesta por centrarse en la primera fase, en la que Uruguay afronta un grupo "difícil" junto a Inglaterra, Italia y Costa Rica, rivales que Forlán considera del mismo nivel, y advierte del peligro de los ticos, un equipo "al que nadie nombra como candidato a pasar de que juega muy bien".
Por ello, el charrúa pide respeto para todos los rivales, aunque no teme cruzarse ya en la segunda fase con el anfitrión o con la vigente campeona.
"Somos un país de sólo 3 millones de habitantes, pero si nos enfrentamos a otros pensando que somos inferiores, no tendríamos la historia o los títulos que tiene Uruguay", destaca el artillero, quien añade que en los choques de octavos o cuartos puede pasar de todo.
Y en el caso de volver a enfrentarse a Brasil en un partido decisivo, descarta que el recuerdo del Maracanazo pueda tener algún efecto ya que sucedió hace "muchos años".
"El pueblo uruguayo lo disfrutó y estamos orgullos de esa gesta heroica. Pero si nos enfrentamos con Brasil, sea final, semis, cuartos u octavos, no va a estar recordándose eso. Para los jugadores será otro partido", señala.
En cuanto al papel que desempeñará con la selección, Forlán considera que dependerá del técnico, y afirma que él se centrará en estar bien físicamente y futbolísticamente para ponerse a la orden del "maestro" Oscar Washington Tabárez.
Y una vez concluya el Mundial, regresará a Japón ya que tiene contrato hasta diciembre con su club actual, y donde tanto él como su mujer están muy a gusto.