1 Hace ocho años a usted le tocó quedarse fuera?
–Ahora con la experiencia uno lo toma con madurez, pero en ese momento fue durísimo, yo realicé toda la pretemporada con los 25 y dos quedamos fuera, Carlos Johnson y yo. Creo que los compañeros por eso tienen la confianza conmigo, porque saben que yo estuve ahí. Va a ser durísimo porque todos han trabajado muy bien, pero el que quede fuera que tenga claro que esto no se acaba ahí, el más claro ejemplo es el mío, que ocho años después estoy a las puertas de mi primer mundial y como capitán.
2 ¿Se nota las ansias en el grupo con los que están más en duda?
–Sí claro, es inevitable porque están demasiado cerca del Mundial y también demasiado cerca de quedar fuera. Aquí la mayoría no han jugado un Mundial, entonces, es difícil que eso no se note, pero independientemente de eso todos están trabajando al máximo y por algo están aquí.
3 Michael Umaña decía que van a dormir preocupados. ¿Cómo lo viven los que sí tienen su campo fijo?
–Si bien es cierto uno tiene su campo ahí, uno también la pasa mal por los compañeros y ver las caras de ellos no es fácil, por más que no esté en esa posición. Por eso estamos con los compañeros, vacilando para que se libere un poco el estrés y la preocupación.
4 ¿Qué decirle a los jugadores que queden fuera y si ya saben cómo va a ser la dinámica para dar ese anuncio?
–No sé cómo será la dinámica pero sí que nos lo van a comunicar mañana después del entrenamiento matutino. Pero yo lo viví y qué mejor motivación que dar mi ejemplo, para uno se acaba el mundo en ese momento pero ese mismo año salí hacia Bélgica y ahora ocho años después estoy a las puertas de cumplir ese sueño. Yo no lo presentí esa vez, por eso fue difícil, hubo otros que lo presentían y quedaron dentro, pero ahora lo importante es que los que no entren deben entender que es una cuestión de cupo.