Desde el Invierno 2007, cuando se comenzó a proclamar campeón en cada torneo corto, en seis de diez oportunidades el ganador de la fase de clasificación no resultó ser el monarca nacional.
Esto quiere decir de nada vale concluir la primera etapa del campeonato de Primera División como líder, pues al comenzar la segunda todos lo clubes tienen igual posibilidad de alcanzar el cetro.
De hecho, solo en cuatro ocasiones el equipo que conquistó la primera etapa del certamen terminó como campeón nacional.
Estos son los casos del Deportivo Saprissa en el Invierno 2007, Invierno 2008 y Verano 2010, y Alajuelense en el Invierno 2011.
Incluso, en el Verano 2011 Herediano rompió el récord de puntos conquistados bajo este formando (con 39 unidades), pero el campeón fue Alajuelense.
En la lista de campeones durante este periodo se registran dos equipos que ya están desaparecidos, como lo son Liberia Mía (monarca en el Verano 2009) y Brujas (en el Invierno 2009).
Pérez Zeledón, con un futbol convincente, se dejó el Verano del 2012, pero al final, Herediano se dejó el título.
Esta situación contradice el objetivo que justificó el declarar campeón nacional en cada torneo corto, cuyo principal impulsor fue Gilbert Fernández, presidente del cuadro generaleño.
Según plantearon, con dos campeones por temporada los equipos autollamados “pequeños” tenían más posibilidades de alcanzar el sitial de honor en el futbol.
El martes, Osvaldo Pandolfo, presidente de la Unafut, propuso volver a un solo monarca.
Ocho de 12 presidentes de equipos apoyaron la iniciativa , la cual deberá ser analizada el próximo año en una asamblea de la Liga de equipo de Primera División.