1 ¿Cómo vivió el compromiso? ¿Ya puede sentirse más tranquilo?
–El juego fue muy sufrido, tal y como lo esperábamos. Pero hay que ganar el martes. Los muchachos lo saben. Yo, por mi parte, me he quitado un peso de encima, pero le repito, hay que confirmarlo el martes, nada hacemos ganando solo acá.
2 Poco futbol, pero mucho coraje, ¿ lo deja satisfecho eso?
–Lo que más me gustó fue la entrega, porque estos partidos se ganan así. La presión es enorme. No se vio un futbol vistoso en algunos tramos del partido, pero sacamos el resultado.
3 ¿Cómo sintió la presión del Cuscatlán? En el Nacional no hay un ambiente así...
Yo lo que le pediría a la afición es que apoye al equipo. Vea que los salvadoreños, a pesar de que en el fondo no tenían mucha esperanza, apoyaron todo el partido, cantaron su himno a más no poder. Nosotros somos muy tranquilos, no tan fervientes.
4 Entonces, ¿es algo de la afición, no del Estadio?
-Uno desearía que la afición nuestra apoye más. Tal vez es porque está más acostumbradas a estas cosas. Pero esperamos que eso cambie en la hexagonal, porque hay que rescatar a este grupo, que cada día estoy más seguro de ir al Mundial.
5 ¿Qué le da esa seguridad?
-Cuando hay una compenetración de cuerpo técnico, jugadores y dirigentes como ahora la hay, uno se siente seguro. Van aflorando los líderes. Este tipo de partidos ayudan.