Opaco, así se mostró Wilson Solano ayer tras perder la opción de llegar a la final de 800 metros lisos en los Juegos Mundiales Universitarios que se disputan en Kazán, Rusia.
Solano cronometró 1:54:22, ubicándose en el sexto puesto del segundo heat de semifinales. En esta manga los que accedieron a la final fueron Jozef Repcik, de Eslovaquia, con 1:49:75, y Andreas Vojta, de Austria, con 1:49:85.
Del primer heat clasificaron: Anthony Romaniw (Canada, 1:47:44), Wesley Vázquez (Puerto Rico, 1:47:56) y Shaquille Dill (Bermudas, 1:47:76). Del tercero: Nijel Amos (Botswana, 1:48), Ivan Nesterov (Rusia, 1:48:04) y Rynard Van Rensburg (Sudáfrica, 1:48:35).
En la prueba Solano cumplió lo planeado hasta la primera vuelta, pero después el cuerpo le cobró factura. Según dijo, el agotamiento lo llevó a acabar con un tiempo superior al de las eliminatorias del miércoles, cuando cerró en 1:53:84.
“Me sentía bien hasta que el ácido láctico me afectó las piernas. Hoy (ayer) me sentía con más confianza, pero me faltó en las piernas”, expresó. “Allá en Centroamérica yo soy de la altura promedio, pero acá la mayoría son enormes, es otro nivel... Siempre he sido de cerrar muy bien, y así pensaba, pero acá me dí cuenta que mi cierre no es nada, acá es otra cosa”, apuntó.
“En este momento me siento un poco triste, pero la verdad estoy agradecido con Dios por haber cumplido mi sueño de estar en un Mundial representando al país y a la universidad (UCR)”.
Ana María Porras también concluyó ayer en la Universiada, al quedar 14° en heptatlón. De esta forma el país acabó su paso.