Stephen Curry sigue catapultándose como una máquina de hacer puntos en la NBA.
El escolta de los Warriors de Golden State protagonizó una nueva exhibición ante los Trail Blazers de Portland, en el Oracle Arena de Oakland, y logró romper su propio récord de triples en una misma temporada.
Curry inició el juego a cuatro triples de su marca de 272, que fijó hace dos años en el último partido de la temporada contra Portland, y ahora suma 276.
El base atinó seis triples antes del entretiempo y dos en la segunda parte (ocho en total), para encabezar, junto con Klay Thompson, la remontada de una desventaja de 13 puntos.
Además, Curry agregó nueve asistencias y Thompson anotó 26 puntos para que Golden State evitara su primera racha de tres derrotas en esta temporada.
Curry da pasos agigantados para adueñarse del título como el jugador más valioso (MVP) de la campaña, algo que quiere, pero que no lo obsesiona.
“Nunca dice nada al respecto, pero sin duda que lo quiere”, dijo el técnico de los Warriors, Steve Kerr, según la agencia AP.
Y el basquetbolista LaMarcus Aldridge coincide con esa apreciación del estratega, al reconocer que Curry “jugó como si quisiera ser el jugador más valioso”.
Para los Warriors (64-15) no se acaban las alegrías, porque aparte de la historia que escribe Stephen Curry en el tablero, el equipo ya tiene la garantía de terminar la temporada regular con el mejor récord de la NBA.
Por si fuera poco, Curry y sus compañeros tienen otra ventaja importante y es la localía durante todos los playoffs .
También Aldridge hizo lo suyo, porque marcó 27 puntos y atrapó seis rebotes, y Damian Lillard agregó 20 unidades y ocho asistencias por Portland, equipo que ya se aseguró el título de la División Noreste.