Román Villalobos sumó su nombre a la ya larga lista de ciclistas costarricenses notificados con resultados adversos en lo que va del año.
El mejor de los ruteros ticos en la pasada Vuelta a Costa Rica arrojó positivo en dos controles antidopaje efectuados el 1 y 3 de marzo anterior, cuando participaba de la cuarta fecha eliminatoria del ránquin chileno con el equipo Coopetires, con el que hizo una pasantía.
Villalobos, quien fue notificado el sábado anterior, aseguró que no solicitará la apertura de la contramuestra pues tiene claro cómo llegó a su cuerpo la sustancia, pero que todo se trata de una movida en la que pecó de ignorante.
Según el rutero, un compañero suyo (Antonio Cabrera) le ofreció un complejo vitamínico pues él no tuvo oportunidad de comprar el suyo; sin embargo, en el frasco no aparecía detallada la sustancia por la que ahora fue notificado.
“Yo estudié todas las sustancias que especifica la etiqueta pero para ignorancia mía en la parte inferior del frasco viene que es un ‘Modulador Selectivo de los Receptores de Estrógeno’, lo que en la lista de sustancia prohibidas aparece como Sarms y que no deduje en el momento, el cual contiene la sustancia Dephenyl-ostarine”, aseguró.
En principio, Villalobos pensó que había sido engañado por su compañero, pero luego supo que él también fue notificado recientemente por el mismo componente.
“Ahí nos fuimos los dos, él primero por ignorancia y yo después por confiar en algo que no conocía”, añadió el ciclista.
Sanción. Al tratarse de una sustancia prohibida, la UCI de inmediato ordenó la suspensión del corredor, quien se encontraba compitiendo en España para el Telco Conorsain, un equipo aficionado de Navarra.
Villalobos ahora se expone a una sanción de hasta dos años por dopaje, periodo que espera reducir lo máximo posible tratando de demostrar que se trató de un error y que en ningún momento tuvo la intención explícita de doparse.
“La audiencia sería en este mes y ahí voy a llevar todas las pruebas que tengo para intentar demostrar que se trató de un error y no algo voluntario, pero ya será la comisión la que decida si me cree o no”, dijo.
El ciclista, quien desde diciembre anterior dejó al JPS-Giant para perseguir su sueño de llegar a un equipo profesional, se unió así a los otros cinco corredores ticos que fueron notificados este año.
Ellos son Enrique Artavia (diurético en Guatemala) y Steven Villalobos y otros tres ruteros del BCR-Pizza por GW-501516 en la pasada Vuelta a Costa Rica.