Pietra Ligure, Italia AP El piloto polaco Robert Kubica fue dado de alta ayer tras permanecer hospitalizado durante 11 semanas por el aparatoso accidente que sufrió en una carrera de rali en Italia.
Kubica estuvo todo tiempo en el hospital Santa Corona de Pietra Ligure, ciudad en el norte italiano.
El hospital informó de que la condición de Kubica es buena y que el piloto iniciará una nueva fase de rehabilitación fuera del hospital.
Tras el accidente ocurrido el 6 de febrero, Kubica se sometió a siete horas de cirugías para que le salvaran la mano derecha. También fue intervenido por múltiples fracturas de hombro, pierna y codo.
Kubica quedó descartado para el inicio del Mundial de Fórmula Uno y su equipo Renault le relevó con el alemán Nick Heidfeld.
El hospital también detalló que Kubica deberá volver para chequeos periódicos con los especialistas que le operaron.
Kubica pasará unos días en su residencia en Mónaco y luego se trasladará a la Toscana para proseguir su rehabilitación con el médico Riccardo Ceccarelli.
Durante una sesión de preguntas y respuestas con seguidores de la F1 la semana pasada, Kubica destacó que se sentía mucho mejor y estaba ganando fuerza y peso.
Se temió que el piloto de 26 años no volvería a competir debido a la posibilidad que le amputasen la mano derecha. Pero ahora dice que todo evoluciona favorablemente.
“La movilidad de mi mano es limitada, pero es algo bastante normal en este tipo de situación (...) Los músculos aún están débiles”, dijo la semana anterior.
Kubica corría en el rali Ronde di Andora cuando el Skoda que manejaba se salió de la calle y chocó contra el muro de una iglesia.