En un solo movimiento los Ángeles de California dieron el golpe más pesado para mover la mesa y cambiar el diagrama de las Mayores: firmaron a Albert Pujols, o El Mejor, y al pitcher C. J. Wilson.
Ni los Yanquis ni las Medias Rojas, tampoco los nuevos ricos Marlins de Miami. El equipo más ruidoso de las reuniones invernales acabó siendo Anaheim.
Los dos ases que se sacó de la manga el presidente de los californianos, Arte Moreno, dejaron pasmado a todo el ambiente del beisbol. En instantes su conjunto pasó de ser contendiente a ser favorito.
El primera base dominicano firmó por 10 años y $254 millones, con lo que se unió al selectísimo club de los $200 millones. Solo Alex Rodríguez, en dos ocasiones, ha pactado por sumas tan asombrosas de dinero, la última vez por $270 millones con los Bombarderos del Bronx.
Wilson, quien era abridor estelar del acérrimo rival de los Ángeles, los Rangers, llegó por cinco años y $77,5 millones. Conformará la alineación más temida de la Americana, con Jared Weaver, Dan Haren y Ervin Santana.
Pujols merece cada uno de los dólares que Anaheim se comprometió a pagar. En 11 años en el beisbol de Grandes Ligas se ha ganado el mote de El Mejor, por su calidad con el bate y en la defensa.
Es parte del reducido grupo de los 400 jonrones (445) y de los pocos candidatos actuales que podrían llegar a los 600. Nunca ha quedado mal una temporada y tiene un promedio de bateo de por vida de .328, con 1.329 impulsadas.
Los dos se vieron las caras en última Serie Mundial, justo a donde los Ángeles apuntan su mirada.