Hasta ayer, solo José Adrián Bonilla, corredor y técnico del equipo Citi-Economy-Blue, había aceptado que un pedalista de su plantel había sido notificado del resultado analítico adverso que experimentó.
El término “resultado analítico adverso” no es lo mismo que un resultado positivo, o sea, dopaje, pues según Félix Murillo, especialista en dopaje, la Unión Ciclista Internacional (UCI) implementó el término para salvaguardar la presunción de inocencia de los ciclistas.
Pese a en las redes sociales se mencionan los nombres de los supuestos afectados, Solano indicó que no puede darlos a conocer, pues afectaría el resultado de la investigación.
“En efecto, ya fuimos notificados de dos casos de resultados analíticos adversos en la Vuelta a Costa Rica, pero no puedo dar los nombres, dado que la investigación apenas empieza y hay un debido proceso”, aseveró el jerarca.
Agregó que como primera medida, ya se constituyó un penal de expertos para que analicen ambos casos. Se trata de los médicos Ileana Carrillo y Willen Buján, así como el abogado Roy Sancho.
“Tendrán un mes para estudiar el asunto, así como escuchar a los ciclistas y sus entrenadores. Luego darán un fallo que, en Costa Rica, es inapelable. Solo se puede recurrir al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), que es internacional”.
En cuanto a sustancia encontrada, Solano indicó que es la misma en ambos casos, pero no recordó el nombre. Explicó que es un medicamento para cicatrizar.
“No se usa solo en ciclismo (por las caídas), sino en todo tipo de heridas. Hace un año fue incluido entre las sustancias dopantes y, al parecer, aquí algunos no se habían dado cuenta”, sostuvo Solano.