Adriana Rojas recibió hoy una de las mejores noticias de su vida, tras de dos semanas de sufrimiento y tensión porque en un control antidopaje de orina se le hallaron rastros de clostebol.
La ciclista brumosa nunca perdió la fe y la UCI la absolvió por el analítico adverso que arrojó, debido a que con pruebas, demostró que nunca tuvo la intención de consumir sustancias prohibidas.
"Fueron dos semanas muy duras para mí, para mi familia, hemos corrido mucho para poder juntar todas las pruebas necesarias y poder presentárselas a la UCI, pero gracias a Dios y a todas las personas que me han apoyado incondicionalmente, ya se demostró mi inocencia y puedo seguir con mi cabeza en alto", comentó Adriana Rojas a La Nación.
Defensa bien hecha. No hubo necesidad de que se abriera la contramuestra, como ella misma lo había solicitado en un principio, ya que las evidencias hablaban por sí mismas.
"Lo que pasó es que 22 días antes de yo viajar a Guatemala, a mi perro, Toby, se le reventó el tendón de una pata, tuvimos que operarlo lo más rápido posible, es mi perro, tuve que curarlo, en ese momento el doctor le había mandado todos los medicamentos, le recetó el neobol y yo se lo apliqué a él, yo tuve que curarlo durante quince días y ahí fue donde yo me contagié, podemos decirlo así, me contagié del neobol", relató Adriana Rojas.
La medallista de bronce en el MTB de los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz está contenta, porque Toby se curó y porque ella cumplió su promesa de demostrar su inocencia.
"Yo sabía que uno como atleta no lo puede usar, pero no sabía en ese momento que se lo apliqué al perro, a mí me podía perjudicar. Así fue como pasó esto. Hoy puedo decir que puedo seguir adelante, que puedo seguir luchando. Nunca me dejé caer, más bien tuve mucha fuerza para seguir adelante y afrontar esta situación", manifestó Rojas.
Reiteró que el apoyo de su familia fue clave para no dejarse vencer, así como el respaldo del Comité Olímpico Nacional (CON), la Federación Costarricense de Ciclismo (Fecoci) y sus patrocinadores, Scotiabank - DosPinos - Deloitte - Ciclo Güilly.
Una luz, El presidente del CON, Henry Núñez dijo que desde el momento en el que la UCI le levantó la suspensión provisional, a las pocas horas de que se había dado a conocer el caso, ya era una luz de que Rojas iba a salir bien librada.
"El 24 de setiembre ella tuvo que someter al perro a una cirugía bastante fuerte, ella mostró las facturas con los productos que le compró y dentro de uno de los productos que le compró estaba esa sustancia, en un spray y lo que quedaba era demostrar que se lo tenía que aplicar dos veces diarias, de acuerdo a la declaración jurada que dio el veterinario, demostrando que al aplicarla en su piel o inhalándola durante 15 días dos veces por día al perro, si era factible", comentó Henry Núñez.
Y el apoyo de la Fecoci fue determinante.
"Nosotros le dimos la asesoría de lo que tenía que hacer y ella lo que hizo fue eso, llamar a la UCI, dar las explicaciones del caso, la UCI lo valoró y consideró que ella decía la verdad y por eso la sanción es mínima, que es la pérdida de los puntos en la Copa Maya, donde se efectuó el control y el pago de 2.500 francos suizos, que es el costo del proceso", destacó el vicepresidente de la Fecoci, Marco Echeverría.