El boxeador costarricense Bryan Vásquez viajó ayer rumbo a los Estados Unidos para comenzar un campamento de preparación para la que será su segunda defensa del título mundial interino de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Tiquito enfrentará al mexicano Diego Armando Magdaleno el próximo 22 de noviembre en Macao, China, en una cartelera en la que el combate estelar medirá a Manny Pacquiao y Cris Algieri.
Vásquez viajó a Los Ángeles a un campamento de ocho semanas en las instalaciones de Papa Joe (Joe Hernández), quien manejó pegadores como Daniel Ponce de León y Abner Mares.
Para Tiquito no es nada nuevo concentrarse en este lugar, pues para su anterior combate en Las Vegas estuvo ahí por seis semanas.
“Aquella vez mejoré mi velocidad, mi golpeo, mi defensa y hasta aprendí a usar mejor la derecha. Ahora sé que tengo mucho más que dar”, indicó el pugilista.
Según Bryan, antes no le gustaba salir del país por mucho tiempo. Era hasta cierto punto “muy casero”; sin embargo, hoy ve como una necesidad estar entrenando en tierras estadounidenses.
“Antes no me gustaba salir del país, pero ahora desde que llegué a Costa Rica ya me quiero ir a entrenar, pues la preparación allá es muy superior. Es totalmente un campamento y es lo que yo quiero hace siempre”, afirmó Vásquez.
Por su sueño. Más allá de mantener el fajón de las 130 libras de la AMB, Tiquito irá con la mentalidad de hacer un gran espectáculo, pues eso le abriría las puertas a un posible contrato con empresas como Top Rank o Golden Boy, dos de las mejores compañías en los Estados Unidos.
“Con Top Rank me falta una pelea para acabar el contrato, pero podría aparecer una renovación con ellos o bien otra empresa.
“Para mí sería importantísimo que ellos me manejen la carrera pues si soy su protegido, sería mejor. Vendrían más peleas y me gustaría pelear cada tres meses”, mencionó el boxeador de 27 años.
Tiquito sabe que de lograr esto tendría que vivir en suelo norteamericano; empero, es una decisión que ya evalúa, incluso ya le habló a su familia de esta posibilidad.
“Quiero sacrificarme y he estado hablando con ellos de que quiero hacer mi carrera allá. Viajaré cada dos o tres meses para ver a la bebé pues quiero llevar una carrera más profesional”, mencionó .
De momento para cumplir todo esto deberá ofrecer un gran show ante Magdaleno y defender el título, pues, aunque no piensa en una derrota, una caída no ayudaría a impulsar más su nombre.
Incluso una de sus metas es ser el campeón mundial y derrotar a Takashi Uchiyama, su deuda pendiente, pues perdió ante él en diciembre del 2012 en Tokio.