Ciudad Cortés. Excelso en su juego, pues no quiso dejar ventanas para que entraran las dudas, el equipo de Atenas se adjudicó ayer el oro en el voleibol masculino de los Juegos Deportivos Nacionales.
Los atenienses consiguieron la presea dorada tras derrotar 3-0 a Pérez Zeledón, mientras que el metal de bronce lo consiguió Belén, que venció, también 3-0, a Miramar.
Los atenienses, dirigidos por un expresivo y apasionado Juan Pablo Núñez, obtuvieron así su novena medalla dorada en las 15 finales que han disputado en hombres.
De esta forma los del cantón de Alajuela se mantienen como el más ganador de la disciplina en varones, seguidos por Turrialba, con seis, y Belén, que suma siete.
Otro dato que marcará historia es que ayer se repitió el marcador de hace 25 años, cuando Atenas había vencido a los generaleños en la final disputada en Heredia.
“Siempre le dije al cuerpo técnico que si este equipo jugaba con todo su potencial iba a pasar esto”, manifestó el entrenador Núñez, refiriéndose a la aplastante pizarra.
Y es que no fue solo el 3-0, sino que los parciales de 25-12, 25-21 y 25-15, en los tres sets , reflejan que los generaleños nunca se “presentaron” al encuentro, y como prueba de ello está que en la primera manga llegaron a ubicarse 20-6 abajo.
“No hay explicaciones, el equipo no se encontró en todo el partido, fue un arranque muy malo y ellos (Atenas) nos presionaron, ningún equipo nos había sacado tan bien como ellos, no pudimos acomodar la defensa y ahí está el resultado”, dijo José Núñez, estratega generaleño, con sudor y lágrimas.
Él, quien abrazaba a sus hijos mientras llorara, explicó que el de ayer fue el último compromiso como entrenador, pues se retira para dedicarse a la familia.
El mismo dolor de Núñez fue el que mostró el equipo sureño al recoger las medallas de plata que recuerdan las de hace 25 años.
Por otra parte, uno que no podía, ni quería, esconder su encendida euforia fue César Gómez, el “10” de Atenas al que la Federación Costarricense de Voleibol designó como el más valioso del torneo.
Buen comienzo. En el caso de Belén, que presentó a seis novatos en el equipo de las justas recién concluidas, la medalla de bronce representa el inicio de un proceso.
“Nuestro principal objetivo era una medalla, y si era posible el oro, claro, pero bueno, al final logramos nuestro objetivo, tenemos nuestra medalla y vamos contentos para la casa”, expresó Cristian Sandoval, director técnico de los belemitas.
El estratega reconoce que Atenas, Pérez Zeledón y el mismo Miramar, que llegó a las justas como favorito, poseen conjuntos mejor amalgamados y de más experiencia en finales de Juegos.
“Trabajando bien y entrenando con disciplina y compromiso se logran los resultados. Esto (medalla de bronce) motiva a los más nuevos, esperamos que las ligas menores de Belén se emocionen y trabajen para esto”, añadió el belemita, quien aspira al oro en San Carlos, la próxima casa de las justas.