Redacción
Tras el primer día de descanso, este martes se reanudó el Giro de Italia, y la lluvia volvió a ser protagonista durante los 112 kilómetros entre Giovinazzo y Bari.
Durante la cuarta etapa fue también actor importante la decisión de los jueces de neutralizar la última de las ocho vueltas previstas al circuito, a causa del riesgo de caídas, que finalmente se dieron a falta de dos kilómetros, pero que no afectó el tiempo de ningún ciclista.
Así, el lote compacto pasó con el mismo tiempo y el ciclista australiano Michael Matthews (Orica) conservó el maillot de líder, mientras que el francés Nacer Bouhanni se impuso al sprint con crono de 2:22:06.
Por su parte, Movistar Team volvió a sortear con éxito el día y Andrey Amador terminó sin problemas la jornada de la Corsa Rosa, en el puesto 178.
"Un día más de lluvia con un circuito muy malo, peligroso. Al final se acordó que a falta de una vuelta todos se ponían con el mismo tiempo, lo cual al final hemos ido tranquilos y evitando caídas", mencionó a La Nación el costarricense.
Los azules siguen con el objetivo de tener a su capo, Nairo Quintana, peleando por la general. El colombiano está en el puesto 58, a 1:09 del primer lugar, mismo tiempo que distancia a Amador (60).
Amador consideró que hasta ahora su equipo va cumpliendo lo planteado.
"Bueno si siempre es positivo (estar bien ubicados) y para eso estamos corriendo tan adelante y desgastando tanto", agregó.
Otro día más de ☔️☔️☔️☔️!!! Mañana más !!! Otro día librado!!! 😰😰😰— Andrey Amador (@Andrey_Amador) Mayo 13, 2014
Disputa en la raya. Bouhanni aprovechó la ausencia del alemán Marcel Kittel, vencedor en las dos primeras llegadas masivas, y que se retiró de la carrera antes de la salida en Giovinazzo por fiebre, para sentenciar en la raya."Estoy muy contento, había tenido un pinchazo en la penúlitma vuelta", declaró el vencedor, uno de los jóvenes talentos del pelotón (24 años).
Bouhanni pudo con el italiano Giagomo Nizzolo y con el holandés Tom Veelers, que había lanzado el sprint desde lejos, justo después de la última curva.
El también italiano Roberto Ferrari fue cuarto, por delante de su compatriota Elia Viviani.