"Celso, ¿usted prefiere ser el peor jugador de un equipo ganador o el mejor de un club perdedor?".
Esa fue la pregunta que le lanzó un niño estudiante de la Escuela Las Letras, de Los Guido de Desamparados, a Celso Borges, volante de la Selección Nacional y del Deportivo La Coruña de España.
Sorprendido, Celso le respondió que lo más importante es que ganen todos los compañeros, y no solo una persona, por lo que prefiere ser el peor jugador de un equipo ganador.
Esa fue una de las tantas preguntas lanzadas por estudiantes de dicho centro educativo este jueves, durante una visita de Celso, el atleta paralímpico Laurens Molina, el volante del Herediano José Miguel Cubero y la surfista Leilani McGonagle.
"El mensaje que se intenta dar es bastante bueno, de seguir estudiando, de seguir en la escuela. Nosotros como figuras importantes, figuras del deporte, debemos esparcir este mensaje. Siempre habrá tiempo para estas cosas, siempre con la intención de ayudar", aseguró el 5 de la Sele.
Además, el volante recordó sus tiempos en la escuela; según él, aún es el mismo extrovertido, pero respetuoso. A la vez, reveló que siempre hablaba con sus compañeros.
Leilani McGonagle también tuvo que pensar dos veces cuando le preguntaron si preferiría casarse con un jugador de fútbol o un surfista. Después de varios minutos, confesó que prefiere a alguien que practica el deporte sobre las olas.
"Me parece muy bello venir y compartir con todos los niños, me acuerdo cuando yo estaba en la escuela y me hubiera encantado tener una actividad así, y la verdad es un privilegio ser tan honrada por todos ellos. Soy fan de ellos, también, porque la verdad son muy lindos", aseguró la joven de 17 años.
Laurens Molina, que en marzo ganó la Maratón de Los Ángeles en silla de ruedas, tampoco se salvó de las interrogantes difíciles.
Uno de los estudiantes le preguntó cómo disimula si le sale un pedo. El atleta se puso rojo, se trabó y, al final, aseguró entre risas que le daría tanta vergüenza que se orinaría en los pantalones.
Molina también se mostró muy feliz de ser parte de una actividad de este tipo, pues aseguró que es importante ser un ejemplo para los niños y jóvenes, que pueden salir adelante ante las diferentes circunstancias que puedan pasar en su vida.
Entre tanto, Cubero tuvo que explicar a qué huele el camerino del Herediano luego de un partido. Aseguró que huele a todo, desde triunfalismo hasta sudor.
Borges y McGonagle coincidieron en que se enrojecen cuando reciben piropos en la calle. La joven surfista indicó que le gusta cuando le dicen cosas lindas, mientras que el volante del Deportivo La Coruña, entre risas y confusión, aseguró que eso se lo agradece al fútbol.
Los espectadores tuvieron la oportunidad de revivir la final del campeonato que recién finalizó, entre Julio Cascante y Justin Salinas como representantes morados, ante Víctor Núñez y José Sánchez como rojiamarillos, en un duelo de fut-tenis que ganaron los morados por la mínima, 5-4.