Hijo del ministro de Energía de Qatar –el mayor de siete hermanos–, Nasser Al-Attiyah quiere ser un “ejemplo” deportivo, dijo recientemente. “Nunca he pensado en ser abogado o doctor. Quería convertirme en deportista y hacer algo para mi país”, añadió.
Sus primeros pasos en la disciplina son extremadamente precoces. Nasser Al-Attiyah, de 40 años, conduce desde los 12 años y su primer auto fue un “Suzuki tres cilindros”. “En casa, no hay policía. Hacía lo que quería. Me gustaba la velocidad. No había problema”.
Con 18 años participó por primera vez en un rali en Qatar. “Mi padre me dijo: “De acuerdo si sólo lo hace unas o dos veces, y después tú verás”, recordó.
En 1995 deja a un lado los rallyes y se lanza a practicar el tiro deportivo, una disciplina que lo condujo a los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996. Abanderado y único atleta de su selección, Nasser disputó tres Olimpiadas más, con un cuarto puesto en Atenas 2004.
El piloto volvió a los ralis en 2003 y su regreso resultó victorioso, tras lograr los títulos en Oriente Medio de 2003 a 2007. Eso lo hizo un héroe. “Hay un libro sobre mí en las escuelas de Qatar”, sonrió.
Su leyenda se extendió a los rally raid. Concluyó su primer Dakar en 2004 en el puesto 10. Luego siguieron dos abandonos y un sexto lugar en 2007. En 2009, BMW lo excluyó de la carrera tras saltarse puntos de control.
El año pasado fue segundo con su nuevo equipo Volkswagen.