El experimentado jugador de Brenes Barva Kay Martínez perdió la concentración el domingo en uno de los momentos más importantes del segundo partido de la final del baloncesto tico ante ARBA San Ramón.
Cuando faltaban pocos segundos para el final del juego, el alero tenía en su poder la pelota, era la última jugada del cotejo y su equipo perdía por un punto.
Probablemente el balón estaba en una de las mejores manos para armar una ofensiva o bien desmarcarse y buscar una canasta que les asegurara el triunfo. Sin embargo, sucedió todo lo contrario.
Martínez pensó que Barva estaba arriba en el marcador y se dio cuenta de su error muy tarde.
“Fue mi error porque pensé que íbamos arriba, entonces frené un poquito en vez de seguir avanzando, tenía todo libre para anotar pero al final no pude”, comentó Martínez a La Nación.
Eso le impidió a su equipo buscar la victoria, que los hubiera puesto 2-0 en al serie. Al final San Ramón ganó 62 por 61.
“Honestamente fue una desatención mía y prácticamente que nos costó el partido.
”A uno le queda el sin sabor de que pudo haber ganado el juego, pero son cosas que pasan”.
Justo cuando Kay erró su tiro, reclamó una falta, pero los réferis no lo consideraron de esa forma y se consumió el tiempo.
Pero para Martínez no terminó ahí. El jugador se fue hacia el árbitro y lo golpeó con su cabeza.
La acción no dio para más, pero el informe arbitral está en manos del Tribunal de Penas de la Liga Superior de Baloncesto y si hubiese sanción se daría a conocer en las próximas horas.
“Sinceramente eso es al calor del juego, pero prefiero no referirme al tema”, aseguró Kay.
En la Federación Costarricense de Baloncesto (Fecoba) prefirieron no emitir criterio y esperar la decisión del tribunal.