Faltan, más o menos, 10 partidos (de 162) para la mayoría de equipos de las Grandes Ligas y solo los mejores en el diamante, dígase la endiablada ofensiva de los Ángeles y los indetenibles Orioles, tienen garantizado el boleto para octubre. También unos Nacionales beneficiados por la debacle de los Bravos.
Es setiembre y la emoción aflora en unas Mayores, donde los cierres son trepidantes desde la implantación del segundo comodín, en 2012.
Americana. Los Ángeles caminan rumbo a las 100 victorias en la temporada, algo que nadie consigue desde los Filis de 2011. ¡Y aún así no han amarrado su división!
Ya tienen garantizado, mínimo, uno de los comodines del Joven Circuito. De cualquier forma, con 94 triunfos y a 10½ de su más inmediato perseguidor, es casi seguro que alcancen su sexto banderín del Oeste en lo que va del siglo.
Los persiguen unos Atléticos a los que muy posiblemente enfrentarán en las series divisionales.
En la Central, los Tigres comandan pero sin que los Reales les dejen de dar pelea. Esos dos equipos seguramente clasificarán, en parte gracias a que la mediocridad en la otrora todopoderosa División Este hace casi imposible que algún conjunto de ahí consiga un segundo boleto para esta postemporada.
Los Orioles, con rendimiento de .603, ya amarraron su primer banderín en 17 años.
Nats y cuatro monstruos. Parece que todos los sobrevivientes de la Liga Nacional serán candidatos a ganar la Serie Mundial. Por ahora, solo están los Nacionales que consolidaron el miércoles su segundo banderín del Este en tres años.
Esa división perdió competitividad a medida que vio a unos Bravos descalabrarse en setiembre.
Caso contrario es el de la extremadamente batallada División Central: Cardenales, Piratas y Cerveceros, en ese orden, están separados por solo cuatro partidos.
Aún falta que Piratas y Cerveceros se enfrenten en una serie de tres partidos este fin de semana. Duelo con tintes de eliminación directa que beneficiará tanto a los Cards como a los Gigantes y los Dodgers, enfrascados en ganar el banderín del Oeste pero con un ojo puesto en la lucha por los comodines.
Los Dodgers comandan su división con solo tres partidos de ventaja sobre los Gigantes. Desde el lunes Los Ángeles acogerá una serie de tres partidos que servirá para definir al dueño de ese banderín.
El perdedor, seguramente, disputará el crudo duelo de comodines, que es a partido único.