Limón quedó congelado ayer en Coronado, pues el equipo de Uruguay y el intenso frío de la localidad se encargaron de hundir a los caribeños en el sótano de la tabla.
Pero lo peor para la tromba caribeña, ayer, fue la forma en la que cayeron derrotados: goleada de 3-0 que los deja fríos en el fondo.
Situación contraria vive Uruguay, que a base de buen futbol comienza a tomar confianza y a soltar las riendas de un buen conjunto.
A los lecheros se les venía negando la victoria constantemente en sus juegos anteriores, pero no por no merecerla, tal vez simplemente porque así es este deporte.
Los caribeños ingresaron al juego muy calientes, inclusive, no permitieron a los locales llegar a media cancha sino hasta el minuto 7.
Estadística poco usual en un equipo casa. Pero Uruguay supo aguantar esa presión que generó su visita, pues sabían que con el transcurrir del tiempo se iban a enfriar.
¡ Así fue! Las escarchadas gotas de lluvia fueron bajando el calor que trajeron los caribeños de su guarida, en este caso el camerino.
Y en ese momento, los lecheros atacaron cuando las extremidades de su rival se comenzaron a dormir por las condiciones climáticas.
Si algo mostraron ayer los dirigidos por Carlos Watson, fue el trabajo que realizan en la semana en táctica fija, pues dos de los tres tantos llegaron por esta vía.
El primero así fue. Rafael Rodríguez cobró un tiro de esquina que Erick Scott recentró y que Keiner Brown materializó en gol.
Así llegó el primero del encuentro al 17’, pero no el único.
Luego del gol, el juego se perdió en media cancha, los equipos se estudiaron mucho y eso evitó que viéramos un juego atractivo.
Vale la pena mencionar que Luis Fernando Fallas, técnico caribeño, intentó volcar el marcador.
Movió fichas desde el primer tiempo, para enderezar a un descarrilado Limón que nunca logró tomar la ruta indicada.
Pero en su deseo de mejorar, quemó todos sus cartuchos al inicio de la segunda mitad, y eso no lo perdonó su rival.
El siempre peligroso Pablo Herrera entró del vestuario con su velocidad y puntería a tono.
Sumó sus condiciones, más los desaciertos visitantes y marcó el segundo tras un trallazo de zurda colocado al palo largo del meta Erick Sánchez. ¡Golazo!
Una daga como esas hace daño y más cuando un equipo viene ingresando del medio tiempo.
Para finalizar la paliza, Keiner Brown anotó su doblete de cabeza, luego de un tiro libre bien cobrado por Marvin Angulo.
Con el abultado marcador, Uruguay quebró el hielo que no le dejaba ganar y aprovechó para congelar en el sótano a un ralo Limón.