El sábado pasado decenas de aficionados brumosos entraron gratis al estadio Rafael Fello Meza en el juego de Cartaginés-Pérez Zeledón por la Copa Popular 2014.
Todo se dio debido a las largas filas que se hicieron en el sector de sol, ya que solo había una boletería habilitada, lo que colmó la paciencia de todos y decidieron abrir las puertas para los aficionados.
Sobre el caso, la Unafut reconoció que cometió un error al llevar un solo boletero a ese partido.
“Fue un error por parte de nosotros de la logística y la planificación de venta de entradas en ese partido, porque solo ahí se dio el problema. En la mayoría de partidos nosotros llevábamos las entradas impresas para venderlas”, explicó el encargado de prensa de la Unafut, José Pablo Molina.
“En Cartago no se llevaron impresas las entradas porque la tiquetera nos confirmó que ahí había Internet y que no había ningún problema para poder imprimir los tiquetes en el lugar”, agregó.
Según detalló Molina, no solo pesó el hecho de que era una sola boletería habilitada, sino que la lentitud del Internet se sumó al problema y se hizo más grande.
Eso sí, la lección ya la aprendió la Unafut y aseguran que tomarán medidas de ahora en adelante para los futuros juegos de la Copa Popular 2014 que finaliza el 10 de agosto.
El torneo es organizado en su totalidad por la Unafut, y todas las taquillas entran a un fondo común del ente rector de la Primera División, contrario a los juegos del campeonato regular que las recaudaciones sí son de los clubes.
El costo total de la Copa Popular 2014 ronda los ¢65 millones, monto que se sufragaría con los patrocinios; de tal manera, los clubes ni la Unafut pierdan dinero.
El ganador de embolsará ¢5 millones, el subcampeón ¢3 millones, y el resto de los 14 equipos un monto de ¢1.5 millones.