Guápiles. Basta con escuchar la convicción de César Eduardo Méndez para saber que el Santos está listo para el Campeonato de Invierno; sin embargo, en sus palabras hay mucho realismo.
Esta realidad puede pesar más que las ganas, ya que en Guápiles tienen muy presente que no son favoritos para clasificar a la segunda fase del torneo.
Un equipo que luche, que compita y que entregue todo es la meta rojiblanca para el campeonato que se aproxima; algo más que eso, nadie se animó a prometer.
Y créanme que esto no es obra del conformismo, al contrario, es reflejo de la experiencia y de las canas que dejan tantos años dedicados al fútbol, que permiten a un técnico y a un equipo trabajador tener los pies sobre la tierra.
Es cierto, el Santos es un equipo que suele dar pelea en el campeonato nacional y que incluso llegó a una final tres torneos atrás, pero en esta ocasión la meta de avanzar a las semifinales está muy lejos en su horizonte.
Cuatro serán los equipos que se clasifiquen a la segunda fase, pero para Méndez esos cuatro cupos ya tienen nombre y apellido: Herediano, Cartaginés, Saprissa y Alajuelense (en orden aleatorio).
Las amplias planillas que tienen estas instituciones superan por mucho a la caribeña, aspecto que aleja al Santos de un boleto directo a la gran fiesta.
Aunque en el fútbol nunca hay nada escrito, sí existen las probabilidades y en este caso no están a favor de los caribeños.
En cuestiones financieras tampoco son superiores, a pesar de que en Santos se están intentando hacer las cosas de la mejor manera, pero parece que eso no basta.
Algo que también hay que tomar en cuenta con respecto a este equipo y es que suma un largo proceso con el mismo técnico, pero a la vez interrumpido en cuestiones de planilla, que año con año se ve desmantelada por los grandes.
Méndez ha formado un equipo diferente, prácticamente, para cada inicio de torneo por la constante salida de jugadores, por lo que el proceso siempre queda a medias y lo tiene que volver a iniciar con el nacimiento de cada competición.
Otra situación que aporta para que el Santos sea nada más un animador del torneo, es la falta de gol, pues su delantera no tiene el peso suficiente para intimidar al rival.
Argenis Fernández es la ficha con más renombre arriba, pero en la temporada pasada su aporte en la red fue casi nulo por lo que en este momento se vuelve una incógnita.
Por otra parte, las contrataciones que se hicieron para reforzar el débil armamento ofensivo también son solo una promesa que esperan se vuelva realidad.
Pablo Brenes casi no tuvo minutos el torneo anterior con el subcampeón nacional y el argentino Federico Miño tiene apenas una semana de haber llegado al país, por lo que aún no es garantía de gol.
Por eso en Guápiles todo lo que se logre superar en expectativas será de gran ganancia, y si no, ya se sabía que el Santos esperaba una muy dura realidad en el Invierno que está a punto de iniciar.