Las críticas o dudas que generó en su ofensiva Saprissa, en el empate a cero contra la Universidad de Costa Rica el fin de semana anterior, quedaron ayer en el olvido.
De la mano del delantero Ariel Rodríguez y del volante Mauricio Castillo, los morados lograron no solo conseguir los tres puntos ante Carmelita con un 3-1, sino que mostraron el caudal ofensivo que había predicado en la previa el técnico Rónald González.
Rodríguez consiguió anoche su primer doblete con la camiseta saprissista en el fútbol nacional.
Eso significó un golpe anímico importante para el ariete, que de inmediato permeó a todos los jugadores y cuerpo técnico tibaseños.
“Esto motiva, pero aquí no importa quién haga los goles, importa más ganar los tres puntos y eso es lo que me pone feliz”, expresó Ariel.
La sequía de goles que presentó Saprissa el fin de semana generó las preguntas obligatorias: ¿funciona mejor con línea de cuatro? ¿necesitará Rónald González optar por dos puntas en su sistema de juego en vez de uno solo?
Ayer los tibaseños regresaron a su habitual línea de cuatro y se notaron mejor, hasta más cómodos.
Este es el sistema que ha utilizado la S con González, pero el domingo pasado quisieron buscar una nueva variante para enfrentar a un rival que sabían que se les iba a encerrar en una cancha pequeña como el Colleya Fonseca, con la idea de romper ese cerco defensivo.
La medida, sin embargo, no surtió el efecto deseado y la UCR supo controlar los arrestos ofensivos de los pupilos de González.
“Todos vieron que contra la Universidad jugamos en una cancha pequeña y contra un equipo que se encerró bien. Aquí en el Estadio Nacional hicimos cuatro goles contra Pérez Zeledón y hoy (ayer) nos vimos bien y marcamos tres contra Carmelita”, dijo Diego Estrada.
No aceptó. Anoche el presidente saprissista, Juan Carlos Rojas, explicó que ellos aceptarían un cambio de día pero no de hora del partido contra Limón.
El juego de los morados contra los caribeños está programado para el sábado a las 3 p. m., pero la dirigencia limonense solicitó cambiarlo para el domingo a la 1:30 p. m.
“Nosotros ya tenemos una programación del trabajo para jugar a las 3 p. m. y no aceptaríamos un cambio de hora, no queremos jugar más temprano. De momento lo único que sabemos es que el juego está oficialmente programado para el sábado a las 3”, dijo Rojas.
El jerarca morado dejó la puerta abierta para que la dirigencia caribeña presente una nueva solicitud y analizarla, pero dejó claro que no jugarán antes de las 3 p. m.
“Si nos proponen jugar inclusive el domingo, pero a las 3 p. m. o más tarde, lo analizaríamos, de lo contrario no”, agregó.
Inclusive este tema podría tratarse esta misma tarde entre los dirigentes de ambos equipos, en la asamblea general de la Unafut, que reunirá a presidentes y representantes de los clubes.