Pérez Zeledón se vuelve a hacer fuerte en su casa

San Isidro del General, Pérez Zeledón. Los Guerreros del Sur volvieron a mandar en su casa luego de que lograron vencer a Belén 2-1 en un partido que sorprendió solamente hasta el tiempo complementario.

Durante el primer periodo, sin armonía alguna, ambos equipos movían la pelota por el terreno de juego en un vaivén que pocas veces lograba alcanzar las porterías, con remates ineficientes muy por encima del mismo marco.

Fueron pocas las jugadas interesantes durante este episodio, aunque hubo momentos que merecían un resultado que nunca llegó.

La titularidad de Allan Miranda sorprendió a la afición generaleña que aplaudía la libertad con que el jugador se movía en el terreno de juego y lograba asistencias importantes a las cuales sus compañeros poco podían responder por la rapidez del defensa.

La primera jugada importante del partido se dio al minuto 16 cuando el mismo Miranda logró un remate por la banda izquierda del terreno, pero Luciano Bostal no pudo llegar a completar la acción.

Una jugada similar desarrollaron los belemitas al 21', cuando Marco Mena remató contra la portería de Luis Diego Sequeira, pero el balón pasó varios metros por encima de la portería.

Al igual que el juego anterior en el mismo estadio Municipal de Pérez Zeledón, el primer tiempo terminó como si fuera una práctica para lo que vendría después.

Sentencia. Ninguna sorpresa llegaba en los primeros minutos del tiempo complementario.

Pero el generaleño Andrés Castri tocó el balón con la mano dentro del área y eso vino a quebrar la modorra que se imponía en el terreno de juego.

Esta acción provocó que los belemitas anotaran mediante penal el primer gol del encuentro al minuto 65, pero lo que no sabían era que el tanto encendería los ánimos de los anfitriones.

Tres minutos después, un remate de pierna derecha de Camilo Aguirre hizo que el portero belemita, Guillermo Moreira, tratara de bloquear la acción tirándose sobre el terreno, pero la longitud de su cuerpo le jugó una mala pasada y permitió la primera anotación de los generaleños.

El estadio, que estaba a un 35% de su capacidad, celebró el gol de Aguirre y ya vislumbraba una victoria de los generaleños.

Nuevamente una acción de los primos y guerreros Juan Diego y Néstor Monge fue lo que permitió lograr el segundo gol del equipo y el último del partido.

En esta jugada, Juan Diego logró un pase a la banda izquierda recibido por Néstor, el cual casi lo pierde, pero con un movimiento de sus piernas logró apropiarse del balón, rematar contra el marco superior de la portería y lograr el gol en una jugada casi imposible.

Poco pudieron hacer los belemitas para responder y se devolvieron a casa con las manos vacías.