Redacción
Pablo Gabas los distingue por su forma de ser: Diego Maradona el emotivo, el que representa el fútbol en pies descalzos, la 'mejenguita' del barrio, y puede contagiar a un equipo completo con su talento y coraje. Lionel Messi, el témpano de hielo, el 'iceberg' que resuelve los partidos más angustiantes, el que se formó en la Masía con todas las fórmulas nutricionales posibles y acabó siendo el mejor del mundo.
"Maradona imponía el carácter, la garra emocional, el empuje y contagiaba al plantel de todo eso. Messi todo lo contrario, es el definidor frío, de pocas emociones, pero también en los partidos al límite aparece", reflexiona Gabas.
Al volante argentino de la Liga le cuesta responder cuál es el mejor. Durante unos segundos piensa su respuesta. Recién terminó el juego de la final nacional, su equipo ganó 2 a 0 y en el calor del momento se hace difícil recordar los pasajes más brillantes de ambos cracks.
“El mejor es Maradona. Messi fue formado de otra manera. Maradona es nacido en la villa, en el barrio, en el potrero y a base de comida ganó un Mundial en México con un equipo que no tenía todas las condiciones. Lionel es formado en La Masía, con los últimos implementos nutricionales que lo van transformando en lo que es hoy, un fuera de serie”, añadió.
Se inclinó por el Pelusa. No solo por su fútbol, sino por el significado de ambos dentro de la cultura de su país: "Maradona es la cara de los argentinos. A Messi se le ha criticado porque no canta el himno. En cambio, Diego representa cualquier excusa para ir a jugar al fútbol. Messi creo que lo hace porque sabe que es lo mejor que sabe hacer", explicó.
En otras palabras, el sentimiento puro, tal cual es. Al final de cuentas hay un aspecto meramente estadístico que resuelve la duda de Gabas, y posiblemente de la mayoría de aficionados a la albiceleste.
"El día que Messi nos haga ganar un Mundial será mejor que Maradona, mientras tanto, lleva una carga importante sobre sus hombros", concluyó.